deberá aprovechar al máximo los cuatro días de descanso que tuvo entre el final de la Copa del Rey que ganó con Barcelona y el viaje que emprenderá mañana hacia la Argentina porque entonces comenzará un raid agotador desde lo físico pero fundamentalmente desde lo mental porque entre su incorporación a los entrenamientos con la Selección y el inicio de la Copa América en los Estados Unidos afrontará el juicio por fraude fiscal que se hace en España.
La Pulga llegará mañana, 25 de mayo, a la Argentina para integrar el plantel de la Selección Argentina que dirige Gerardo Martino y que se prepara desde ayer en Ezeiza para disputar el certamen centenario en tierra norteamericana.
Cinco días después, el 30 de mayo, regresará a Barcelona porque el 31 se celebrará el comienzo del juicio por supuesta defraudación al fisco por 4,1 millones de euros respecto del cual la Abogacía del Estado pidió siete meses por cada uno de los tres delitos (los tres años en los que supuestamente no declaró algunas de sus ganancias), mientras que la Hacienda (órgano fiscal de España) solicitó 22 meses de cárcel para el jugador.
Allí será juzgado tanto Lio como su padre, Jorge Messi, responsable del manejo de las ganancias del delantero estrella del Barcelona y la Selección Argentina.
Una vez presenciado el inicio del juicio, Messi tomará un vuelo a los Estados Unidos para completar el plantel de la Selección que viajará hacia allí el 28 de mayo pero sin La Pulga. El delantero llegará a la ciudad norteamericana donde hará base el equipo nacional para ponerse a punto para el 6 de junio, cuando será titular en el debut ante Chile a las 23 (hora de la Argentina) en San Francisco.