Tenía que meter tres goles para pasar de ronda directamente pero solo pudo convertir uno. Le ganó 1 a 0 a Independiente del Valle en el Monumental pero quedó eliminado de la Copa Libertadores en los octavos de final.
El equipo de Gallardo fue absoluto dominador. Tuvo la pelota siempre en su poder y buscó, desde el primer minuto, abrir el marcador. Agresivo e insistente, el millonario llegó pisó el área ecuatoriana con frecuencia. Andrés D'Alessandro, el alma del equipo, volvió a ser clave para estructurar el ataque. Pero su calidad y su esfuerzo no alcanzaron para poder ganar el encuentro.
En el primer tiempo River llegó en seis oportunidades. Dos remates de D'Alessandro que se fueron al lado del palo, dos remates de Mora que pasaron cerca del travesaño, un cabezazo de Alonso que quedó en las manos del arquero y un remate del uruguayo que se fue arriba del travesaño. El dominio del millonario fue abrumador.
Independiente del Valle hizo valer en el Monumental el resultado obtenido en la ida. La diferencia de dos goles le dio tranquilidad para aguantar en el fondo y no desesperarse por buscar con un gol de visitante. Se paró de contra y trató de cerrarse con orden en el fondo. Mina y Caicedo sacaron todos los centros que River tiró al medio del área. Fueron claves en la defensa del resultado y el mínimo orden que intentó mantener la última línea.
La única jugada de gol que tuvo el equipo de Ecuador estuvo en los pies de Angulo. El delantero aprovechó un error en la salida de Balanta y encaró hacia el área. Cuando quedó frente a frente con Barovero, remató con potencia y antes de que Maidana llegara a cerrarlo. El arquero de River sacó la única jugada en la que lo exigieron y mantuvo el arco en cero.
En el complemento la presión de River sobre el área de Independiente del Valle comenzó a surtir efecto. Todos los volantes pisaron el área e hicieron circular la pelota con rapidez. Le dieron dinámica y vértigo al juego. Mantuvieron la presión alta y la rusticidad en la marca. El resultado negativo era un peso que obligaba a poner la pierna fuerte y hacer más friccionado el partido.
D'Alessandro volvió a tener la oportunidad de marcar el primero con un tiro libre que se fue bien cerca del travesaño. El uruguayo Mora perdió dos chances en pocos minutos y Lucas Alario se topó en el camino con la efectividad del arquero Daniel Azcona. El número uno fue la figura de su equipo y fue clave para evitar que River marcara, mínimamente, los dos goles que necesitaba para llegar a los penales.
Balanta, Nacho Fernández, D'Alessandro, Alonso, Alario, Ponzio. Todos ellos tuvieron la posibilidad de marcar los goles que necesitaba el millonario. A los 78' fue Lucas Alario el encargado de convertir el 1 a 0 y darle aire a River. El gol generó aún más presión en un Monumental repleto y con hinchas que no podían creer las chances que desperdiciaba su equipo.
En los últimos minutos, el arquero de Independiente del Valle se ganó la chapa de salvador. Se quedó con las ilusiones de River y amargó la fiesta en el Monumental. Desesperado por las constantes llegadas del conjunto de Núñez, trató de ordenar al equipo desde el fondo. Sacó todo lo que le tiraron hasta el último minuto y así logró que su equipo ingrese a los cuartos de final.
River quedó eliminado en los octavos. El defensor del título no tuvo capacidad para remontar la dura derrota de visitante. Pese al esfuerzo de sus jugadores el equipo de Gallardo quedó eliminado de la Copa con un rival claramente inferior. Sin chances en el torneo y afuera del certamen internacional, el único objetivo de River será la Copa Argentina. En ese certamen federal está la única llave que lo puede llevar a la próxima Copa Libertadores.