El bono que más recibió demanda fue la emisión a 10 años, tal como siempre sucede en el mercado, ya que ese plazo actúa como "benchmark" o sea "referencia" para el mundo financiero. Seguramente la tasa será menor al 7,5 por ciento.
La ola de inversores que buscaron comprar los bonos marcaron el apetito por la deuda argentina, en su primera emisión internacional de deuda después del
default. La avalancha de inversores hará que el equipo de Finanzas encabezado por Luis "Toto" Caputo
pueda bajar las tasas de interés para financiarse a un costo más bajo. Hoy "cortarán" las ofertas recibidas en base a la tasa que quieran pagar, que podría ser de entre 6,25 y 8,50%.
El equipo económico había marcado la cancha en lo que sería la operación financiera del año, el retorno del país al mercado de capitales internacional. Publicó el lunes por la mañana las Initial Pricing Thoughts (IPTs), como se conoce en la jerga financiera a la guía inicial de tasas, para los bonos que colocaba este lunes en los mercados globales. Para el bono a 3 años, en torno al 6,75%; para el de 5 años, alrededor de 7,50%, para el de 10 años iría a 8%; mientras que para el de 30 años estará en cerca del 8,75%. Estas tasas son estimativas y, en realidad, sólo sirven para avisarle al inversor que ese será el techo que convalidará.