Cristina culpable... de tanto amor

Guardar

"Qué lástima el feo día. Mucha gente habrá querido venir, y por esta lluvia... no."

(Presidente Mauricio Macri, 1° de marzo de 2016)

"La culpa es de uno cuando no enamora, y no de las excusas ni del tiempo."

(Mario Benedetti)

Cuesta sentarse a escribir luego de un día como el que vivimos el pueblo y la militancia kirchnerista en las calles de Comodoro Py. Hermanados en una rara mezcla de sensaciones. Entre la alegría de volver a escuchar en vivo a Cristina Fernández de Kirchner, la Presidenta -así la siguen llamando hasta sus detractores-, y la tristeza por tanto daño causado en ciento veinte días. El resultado no podría haber sido otro que el de tantas fotos que retratan esta mañana histórica: una pueblada gigantesca.

El 13A no es el 17 de octubre de 1945, pero ambas fechas a partir de hoy comparten un lugar en la historia no escrita de los pueblos: el de las gestas históricas. Van contra Cristina, una vez más, para ir en contra de la política y de la organización popular. En ese sentido, hay que decirlo: gracias, doctor Bonadio, por tremendo acto. No sorprende: estamos viendo las mismas escenas en Brasil por estas horas. También a través de la (in)Justicia, y contra otro gobierno popular.

El presidente Mauricio Macri ayer visitó mi ciudad, Quilmes, por tercera vez desde su asunción. Y, nobleza obliga, estuvo muy acertado cuando se refirió a CFK. Dijo que "estuvo muy ausente estos meses". Bien saben de eso los miles de despedidos y otros tantos con el temor a engrosar esa triste lista; los usuarios del transporte, y de los servicios públicos en general; Milagro Sala, la primera presa política del gobierno de Cambiemos a través de un gobernador aliado, Gerardo Morales; y el hambre que empieza a sentirse en los barrios más profDiputada nacional, Frente para la Victoriaundos del conurbano; un drama que ya se reconoce unánimemente.

Me releo y quiero corregir algo que escribí más arriba: no van contra toda la política, sino contra las políticas que simboliza Cristina como conductora de doce años de construcción y recuperación de derechos.

Creyeron que con papeles de expedientes judiciales taparían el ajuste: se equivocan, les gritaron hoy centenares de miles. El pueblo no come vidrio: está comiendo cada día menos, y quiere respuestas por ello. Y no se trata sólo de los que siempre confiaron en Cristina, y por eso queremos abrazar también, como pidió ella, al 51 por ciento defraudado por las promesas de cambio. No nos mueve el rencor de quienes descalifican como 'grasa' o con otros insultos al otro 49 por ciento, sino el amor a un pueblo, que es uno solo pese a diferencias ocasionales. Porque, en definitiva, todos queremos lo mismo: vivir mejor. ¿Hoy viven mejor?

La frase de Mario Benedetti con que elegí encabezar esta columna me parece una descripción precisa de lo que diferencia principalmente al actual Presidente de Cristina. La soledad y los vallados de sus convocatorias contrastan cada vez más con el amor popular a la figura de nuestra Compañera Coraje. Cariño que crece minuto a minuto, como lo demostró la inmensa caravana que, desde todos los puntos del país, se dio cita para decirle que no está sola. Porque es agradecida hacia quien, a su vez, tampoco los deja solos a ellos en su hora más difícil.

Valieron la pena los meses de espera cuando se la escucha, desde la multitud y con un respetuoso silencio, avisar que no dejará sus convicciones en las puertas de Comodoro Py, de la misma forma que en 2003 Néstor Kirchner avisó que no dejarían sus convicciones en las de Casa Rosada.

Se termina una jornada histórica, de la que nos vamos con el corazón lleno y la mente cargada de ideas y convicciones. Hemos escuchado a la líder indiscutida de la oposición política, pero fundamentalmente a la líder de un pueblo que la ama y la extraña. Quizás la consigna más importante sea la de conformar un frente ciudadano. Para lograrlo contamos con lo más importante: amor y conciencia política.

Es hora de que vuelva a salir el sol para nuestro pueblo. Como reapareció hoy después de tanta lluvia... y de escucharla a Cristina. El clima decoró de poesía su palabra revolucionaria.


Diputada Nacional, Frente para la Victoria


Guardar