El escándalo internacional del denominado #PanamaPapers sumó hoy un nuevo actor argentino a la larga lista de personajes que abrieron sociedades inscritas en paraísos fiscales a través del bufete de abogados panameño Mossack Fonseca. Se trata de Alejandro Burzaco, el ex CEO de la empresa Torneos SA.
Los periodistas de La Nación Iván Ruiz, Maia Jastreblansky y Hugo Alconada Mon, quienes accedieron a los documentos filtrados, informaron que el empresario poderoso del fútbol argentino movió USD 370 millones a través de una red de sociedades montadas en varios paraísos fiscales para obtener los derechos de TV de la Copa Libertadores durante 14 años.
La publicación destaca que Burzaco utilizó la misma metodología que llevó a la justicia de los Estados Unidos a detenerlo –está con prisión domiciliaria en Nueva York– como uno de los protagonistas excluyentes de otro escándalo mundial conocido como #FIFAGate.
La investigación ubica a Burzaco como responsable de una sociedad identificada como Torneos & Traffic Sports Marketing LTD (T&T), con sede en las islas Caimán. Según surge de cientos de documentos y extensos intercambios de correos electrónicos, T&T cedió los derechos de TV a la sociedad Torneos &Traffic Sports Marketing BV, radicada en Holanda, para que operara como intermediaria en la negociación con los canales de televisión. Y detrás de esa firma holandesa, el estudio panameño montó pantallas vía Chipre y Uruguay para evitar conocer al verdadero dueño.
La información del ICIJ y el diario alemán Süddeutsche Zeitung, a la que tuvieron acceso algunos medios argentinos, reveló que Torneos y Competencias SA (TyC) es dueña del 25% de la sociedad offshore T&T, que concretó el pago de USD 370 millones a la Conmebol (Burzaco era el CEO de TyC)
El vínculo de T&T con la Conmebol tuvo 3 etapas, destaca el diario La Nación: "El primer contrato se firmó el 22 de agosto de 2003 por las ediciones de la Copa Libertadores en el período 2004-2010. Ese contrato se prolongó después a 2014 y, por último, se volvió a renovar hasta 2018".
Ese último acuerdo –firmado el 6 de marzo de 2008– exigía "confidencialidad" sobre la relación comercial, incluso después de concluido. Y llevó la firma de los argentinos Julio Grondona y Eduardo Deluca, ambos miembros de la CD de la Conmebol, y el presidente de la entidad, el paraguayo Nicolás Leoz.
Existen otros datos que confirmarían la "afinidad" entre T&T y la Conmebol: "La confederación obtuvo la prioridad en cada renovación. Incluso, en el último contrato la empresa pagó una prima de USD 4 millones extras", según la versión periodística.
Como se reveló, para poder lograr el objetivo y evitar el pago de impuestos se montó una pantalla vía Chipre y Uruguay. En 2012 T&T cedió sus derechos a la firma Torneos&Traffic Sports Marketing BV, con sede en Países Bajos. Detrás de esta firma holandesa, Mossack Fonseca interpuso Medak Holding Ltd., registrada en Chipre, que a su vez estaba controlada por la firma uruguaya Henlets Group.
La firma holandesa intermediaba –por ejemplo– en la venta de los derechos con la cadena brasileña TV Globo. Llegaron a negociar contratos entre 2004 y 2019 por USD 10 millones, dinero que se depositaban en el ING Bank de Amsterdam.
Pero eso no es todo. Mientras comercializaba los derechos ya adquiridos, Torneos&Traffic Sports Marketing BV ejecutaba curiosas subcontrataciones, una y otra vez, con José Margulies, un empresario argentino-brasileño acusado en los Estados Unidos de ser el facilitador de las comisiones ilegales a los dirigentes de la Conmebol. Las contrataciones eran las firmas Somerton Ltd., registrada en Turks y Caicos, y Valente Corp., en Panamá.