La Policía Federal de Brasil encontró indicios de que la presidente Dilma Rousseff operó para intentar evitar la prisión preventiva de Lula da Silva. Un diálogo telefónico entre Rousseff y Lula difundido por el juzgado de Curitiba, donde actúa el juez Sergio Moro, mostró que la mandataria le avisa que le va a enviar el "acta de nombramiento" para que la use cuando lo necesite.
La conversación fue grabada este miércoles por la tarde, unas horas antes de que se confirmara la asunción del líder del PT como jefe de gabinete.
Lula usó, para hablar con Dilma, el teléfono del teniente Valmir Moraes da Silva, cuyo aparato estaba intervenido con autorización judicial.
El diálogo que compromete a la presidente Dilma Rousseff:
-Rousseff: Hola
- Lula: Hola
- Rousseff: Lula, escúchame.
- Lula: Dime, querida. Ajá...
- Rousseff: Mira, estoy mandando a 'Bessias' (por Jorge Messias, subjefe de asuntos jurídicos de la Presidencia) con el papel para que lo tengamos, úsalo sólo en caso de necesidad, que es el acta de asunción, ¿está bien?
- Lula: Ajá. Está bien, está bien.
- Rousseff: Eso, nada más, tú espéralo ahí que está yendo.
- Lula: Está bien, estoy acá, me quedo esperándolo.
- Rousseff: ¿Está bien?
- Lula: Está bien.
- Rousseff: Chau.
- Lula: Chau, querida.
El ex mandatario, de 70 años y fundador del Partido de los Trabajadores (PT, izquierda), estará a cargo del Ministerio de la Casa Civil, una especie de jefatura de gabinete de gran influencia en toda la acción gubernamental.
El nuevo cargo le permitirá al ex mandatario blindarse de las investigaciones que lleva a cabo Sergio Moro, el juez que analiza su lujoso tríplex frente al mar y su implicancia en la
de Petrobras. A partir de ahora, esas causas pasarán de la Justicia común al ámbito de la Corte Suprema, lo cual dilatará el proceso, por lo que la oposición considera que el propio gobierno está dejando de lado su "compromiso" de defender la Constitución y las leyes.