El té de sen es una planta originaria de India, Pakistán y China que se utiliza para casos de estreñimiento y problemas de digestión. El sen entra en la categoría de laxantes estimulantes que actúa directamente sobre la mucosa intestinal, aumentando el peristaltismo del colon y la secreción del agua. Según algunos estudios, “contiene compuestos que irritan el recubrimiento del intestino generando un efecto laxante”.
Además, inflama el intestino para lograr un tránsito rápido, lo cual, de alguna forma, va en contra de la naturaleza del organismo y sus funciones. Si bien es un ingrediente natural, es importante tener cuidado al consumirlo. “La cantidad exacta de senósidos puede ser difícil de determinar cuándo se consume el té. Por eso es más aconsejable el consumo de suplemento de sen estandarizado para reducir el riesgo de toxicidad”, explicó la doctora Mónica Katz a Infobae.
El abuso de este producto genera una dependencia exhaustiva que ocasiona ir al baño constantemente y puede dañar los tejidos del colon, formando un intestino vago. "Es importante destacar que muchos piensan que este producto podría mejorar el organismo, pero en realidad empeora el sistema digestivo", dijo la especialista en nutrición.
Este té de hojas arrastra una tendencia equívoca la cual se cree que ayuda a adelgazar a cualquier precio. Sin embargo, las investigaciones coinciden habitualmente en lo dañino que es para el organismo su consumo en exceso.
El té de sen, como tantas infusiones, se ha convertido en el principal aliado de las dietas, en donde se piensa que por comer de más y luego consumir algún laxante, el cuerpo no gana peso, ya que elimina las grasas más rápido. Katz sostuvo que el té de sen está aprobado por la Administracion de Drogas y Alimentos de Estados Unidos(FDA) como laxante. “Los compuestos activos de esta infusión son los senósidos. La dosis máxima aconsejada está entre 0.5 y 2 gramos de hojas por taza o media cucharadita. La toxicidad aparece en dosis mayores a 3 ó 4 miligramos por día de senósidos”, dijo la doctora.
La especialista en nutrición Mónica Katz elaboró una lista con los principales cinco problemas que se generan por el abuso del té de sen:
- Deshidratación por aumento de diuresis y diarrea
- Hemorragias, ya que disminuye la vitamina K. No se puede porque disminuye vitamina K. No se puede utilizar junto a anticoagulantes por riesgo de hemorragia.
- No se puede usar en pacientes con patología cardíaca, pues es estimulante e incrementa riesgo de falla cardíaca.
- Daño hepático y coma.
- Contraindicado en embarazo por riesgo de contracciones y parto prematuro.