Las Fuerzas de Defensa de Israel arrestaron en Hebron, Cirsjordania, a dos hermanos que realizaron varios ataques en el último tiempo y que hirieron a civiles y soldados del Ejército, aseguró el Shin Bet, el servicio de inteligencia y seguridad general interior del gobierno que encabeza Benjamin Netanyahu.
Los hermanos Nazar Fizel Mohamed Badie, de 23 años, y Akram Fizel Mohamed Badie, de 33, ambos miembros del grupo terrorista Hamas, confesaron que utilizaron lo alto del edificio que es propiedad de sus padres para llevar a cabo los atentados con armas.
"Después de atacar en la Tumba de los Patriarcas el 6 de noviembre a varios civiles y herirlos de gravedad, fueron a la boda de su primo", aseguraron los servicios de inteligencia.
En otro ataque, llevado a cabo el 25 de noviembre, Nazar abrió fuego desde el mismo edificio contra un grupo de soldados en la Tumba el Patriarca. Sin embargo, tuvieron mala puntería: sólo lograron golpear un coche estacionado.
El último 2 de enero, Nazar vio a otro grupo de militares en el mismo lugar y le pidió a Akram que le llevara el rifle para dispararles. Fue finalmente el mismo Akram quien disparó contra los oficiales. Más tarde el mismo día, los hermanos hirieron a otros soldados en un puesto de control del sur de Hebron.
La metodología utilizada era la siguiente: subían hasta la tercera planta de la propiedad, que estaba en proceso de remodelación, y utilizaban el techo para disparar contra soldados y civiles. Duante sus ataques hirieron a al menos cuatro israelíes.
Además del rifle utilizado por los francotiradores, las fuerzas gubernamentales también encontraron una metralleta casera y un silenciador hecho de un filtro de aceite que aprendieron a construir después de ver videos online, detalló el Shin Bet.
Los hermanos decidieron cometer los atentados como forma de vengar la muerte de un palestino que había intentado atropellar a judíos en Cisjordania y, sin embargo, no lo logró y fue "neutralizado".
La ola de violencia que vive la región desde el pasado 1 de octubre y en la que han muerto 181 palestinos, dos tercio de ellos al perpetrar o intentar cometer ataques confirmados o supuestos contra israelíes, y el resto en enfrentamientos con las fuerzas de seguridad en Jerusalén Este, Gaza y Cisjordania. Un total de 30 israelíes y tres personas de otras nacionalidades han perecido víctimas de estas agresiones.
Según las estadísticas del Ministerio de Asuntos Exteriores israelí, en los últimos cinco meses atacantes palestinos han llevado a cabo o intentado cometer 187 apuñalamientos, 75 ataques con disparos y 39 atropellos intencionados, datos que las autoridades palestinas cuestionan.