En medio de una sequía preocupante de figuras, el fútbol inglés busca con devoción a la próxima estrella que pueda sacarlos del pantano que están sumergidos y de la sangría que se generó tras la irrupción del ya hoy veterano Wayne Rooney. Y es el mismo Manchester United quien renueva las ilusiones de la cuna de este deporte con la aparición de un joven prometedor: Marcus Rashford.
Hace apenas 72 horas el pibe de 18 años criado en la cantera del Old Trafford abandonó el anonimato para convertirse en héroe: marcó dos goles fundamentales para remontar la serie de Europa League ante el Midtjylland que había arrancado esquiva y ponía la cabeza de Louis van Gaal en la guillotina.
Su historia ya comenzó como una verdadera novela: ante la lesión que marginó a Rooney de las canchas durante dos meses, el entrenador holandés iba a colocar en la ofensiva a Anthony Martial, aquel delantero francés por el que abonaron una fortuna unos meses atrás. Pero en el calentamiento previo al duelo con el equipo danés, Martial también sufrió una lesión y van Gaal no tuvo otra opción que tirar a la cancha de entrada al debutante Rashford.
Después de un primer tiempo prometedor, el técnico tuvo que hablar con él: "No estaba preocupado, Rashford era la mejor opción. Ha sido increíble. En la primera parte corrió demasiado, de un lado a otro, y en el descanso hablé con él. 'Tienes que estar cerca del área y marcarás'. ¡Y anotó dos goles! Fue fantástico".
Como si la historia fuese tramada por un escritor, Marcus le arrebató un cetro al mítico George Best: se convirtió en el futbolista más joven en marcar con el United en competencias europeas (18 años y 117 días contra los 18 y 158 del irlandés). E imitó a otras luminarias de la institución como Rooney y Van Nistelrooy en debutar con un tanto.
Claro que su camino de ensueños no culminó ahí y tuvo un nuevo capítulo contra el Arsenal, por la Premier League. Asediado por la irregularidad y las lesiones, van Gaal le tiró por segunda vez la 9 al juvenil que ya tuvo pasos por la Sub 16 y Sub 18 de Inglaterra.
¿Resultado? Volvió a responderle: doblete en tres minutos para alcanzar su cuarto tanto en dos partidos. Además, sacó de la línea lo que era el empate en el primer tiempo de los Gunners y asistió a Ander Herrera en el tercer tanto.
Este pibe que arribó a las inferiores de United con 14 años en 2011, ya se roba los flashes de todas las tapas británicas con tamaño debut a la espera de que no sean solamente 15 minutos de fama.
Mientras tanto, su entrenador en las juveniles Paul McGuinness lo describre: "Él puede marcar goles increíbles, librándose con facilidad de tres defensas, pero debe tener más instinto asesino como Ruud van Nistelrooy, que era capaz de anotar con la rodilla o después de varios rebotes debajo del larguero".
¿Nueva figura o estrella fugaz?