Samsung presentó los Galaxy S7 y S7 edge

Samsung dijo presente en la Mobile World Congress (MWC 2016) de Barcelona, escenario elegido para dar a conocer el tope de gama en su línea de smartphones: Galaxy S7 y Galaxy S7 edge, la versión con bordes redondeados que debutara el año pasado en el mismo congreso de móviles.

Con un display de 5,1'' en el caso del S7 y de 5,5'' en el del edge -en ambos casos 2560 x 1440), los dispositivos se caracterizan por las mejoras en la cámara, con una tecnología que Samsung definió como Dual Pixel.

Así como hicieran HTC y otras fabricantes con sus cámaras, la del Galaxy S7 agrega mejores lentes, con más apertura, capaces de utilizar píxeles más grandes. Samsung prometió además tomas más rápidas y un mejor autofoco, aún en condiciones de poca luz. La apertura es de F1.7.

Frente al Galaxy S6, la cámara baja de 16 a 12 megapíxeles, pero eso no significa que las fotos sean de menor calidad. De hecho, dijo la empresa, la cámara de su equipo capta 30% más de luz que la del iPhone 6S.

La cámara posee además el modo Motion Panorama, donde el usuario podrá tomar panorámicas con movimiento para una experiencia más inmersiva en ese tipo de fotos.

Samsung decidió incorporar una mejora que los usuarios de Moto X conocen a la perfección: una pantalla con notificaciones inteligentes, donde el usuario no debe tocar el display para saber quién le escribe o llama.

Los Galaxy S7 y S7 edge volvieron a incorporar resistencia al agua y el polvo gracias a su certificación IP68 (media hora bajo medio metro de agua). El dato curioso es que no requiere tapones para la ranura de microUSB o la de los auriculares.

Al mismo tiempo, agregan recarga rápida de batería en modo inalámbrico. La batería del S7 es de 3000 mAh y la del S7 edge de 3600.

Viene en dos versiones: 32 o 64GB, pero el dispositivo permite agregarle almacenamiento mediante microSD de 200GB.

Los Galaxy S7 y S7 edge vienen con 4GB de RAM y procesador Qualcomm Snapdragon 820 o Exynos 8890, dependiendo de la región.

Ambos están diseñados en metal y vidrio reforzado, al igual que la generación anterior, pero con la diferencia de tener bordes más redondeados.

Gracias a los mejores procesadores y batería, los Galaxy S7 y S7 edge prometen una experiencia más rica para los fanáticos de los juegos móviles.

Esa mejora se complementa con Game Launcher, donde los usuarios pueden administrar el consumo de batería y notificaciones. Pero lo más importante para por el hardware, dijo Samsung, ya que agregó un sistema de enfriamiento interno mediante líquido para evitar que el dispositivo se recaliente mientras se juega.

La característica del enfriamiento por líquido ya estaba presente en los Lumia 950 y 950 XL que Microsoft presentó hace unos meses atrás. Según explicó Samsung, se trata de una placa con líquido en el interior encargada de la refrigeración.

Los Galaxy S7 y S7 edge comenzarán a ser vendidos el 11 de marzo en los EEUU, pero a la Argentina recién llegarían pasado el segundo trimestre. Su precio rondará los 720 euros. En algunos países, la preventa incluirá de regalo un casco de realidad virtual Samsung Gear VR.