La costa este de la Florida, con Miami, Ft Lauderdale y Palm Beach -en una hilera que también incluye a Hollywood, Boca Raton y Pompano Beach- es la más conocida para los argentinos y la que más visitantes recibe entre nosotros.
Pero la otra costa del estado, la que da sobre el Golfo de México, ofrece lugares increíbles, muy diferentes de los que uno encuentra en el Atlántico, con una geografía, un color de agua, una arena particulares.
Una porción de esa área, la comprendida alrededor de la Bahía de Tampa y que comprende tres comunidades, la propia ciudad de Tampa, St Petersburg y Clearwater, es una de las más destacadas y quizás desconocidas por los argentinos.
Las tres están en un radio muy cercano -de hecho, St Pete y Clearwater interactúan y funcionan como si fueran un solo pueblo- y pueden visitarse en un período de vacaciones que hasta puede combinar los parques temáticos de Orlando, distantes a un poquito más de una hora hacia el este, en pleno centro del Estado.
El primer hecho que a uno lo impacta es la densidad de la arena: se trata de un polvo blanco, más fino que la sal. Las dimensiones de las playas son inmensas y el agua es bien distinta de la del océano Atlántico: aquí el oleaje es tranquilo y el color vira más al verde transparente que al turquesa.
El centro comercial de Tampa se encuentra en el extremo norte de la gran bahía, a unos pocos kilómetros de la costa. Es un gran centro metropolitano con muchos edificios comerciales, oficinas y establecimientos de venta al público.
Clearwater es la comunidad de playa ubicada al oeste de este centro comercial, sobre la costa del golfo. Ofrece muchas opciones en hoteles, moteles, restaurantes y atracciones turísticas. También tiene un puerto pesquero con botes para excursiones de paseo y botes de alquiler para salidas de pesca. St Petersburgo -o San Pete- se encuentra al sur de Clearwater, sobre la península que se extiende desde la Bahía Tampa y el Golfo de Méjico.
El clima de la Bahía de Tampa es semi-tropical, como en el resto de Florida. Los veranos son calurosos y húmedos. Los inviernos, templados. La primavera y el otoño son a menudo las mejores épocas del año, con días soleados y noches frescas. En Florida llueve mucho, especialmente durante los meses de verano, entre junio y septiembre.
No puede dejar de visitarse el Museo Dalí, el más grande del mundo dedicado al pintor después del de Figueras, en España. El museo está ubicado en una zona muy bonita de la ciudad, frente a unos muelles deportivos y al lado del teatro. El edificio es espectacular, con aire modernista acorde al artista que alberga. Las instalaciones son amplias, no es agobiante. Generan tranquilidad, es un espacio limpio.
Para los que puedan estar aquí un sábado, el Saturday Morning Market es una experiencia completamente original. No es el típico mercado al que estamos acostumbrados. Es un lugar pintoresco, donde los chacareros y agricultores de la zona ofrecen sus productos. Se disfrutan mucho todos sus puestos. Todo es fresco y rico. Lo preparan al momento. Es muy recomendable.
Obviamente, en el área de Tampa, Busch Gardens sobresale como centro de entretenimientos para todos. Busch Gardens tiene montañas rusas, actividades acuáticas, complejos de escalamiento para los chicos, excelente entretenimiento musical, y extendidas tierras de safari con animales salvajes. Es un universo increíble de diversión, y tan diverso que es difícil elegir un favorito.
Después de tanta adrenalina que mejor caminar por estas playas grandes, que parecen inacabables. Si hay suerte, hasta se pueden avistar delfines a pocos metros de la costa que se divierten saltando como si supieran que están dando un espectáculo gratuito. La playa es limpia y cuidada. Excelente para disfrutar el atardecer. No hay que perderse la puesta del sol en Pier 60.
Bordeando la playa hay una excelente costanera con amplias veredas, mucho lugar para estacionar. Todo está a pasos de la zona comercial de la isla. Es ideal para caminar por la noche y comer algo. Lindos bares y restaurantes, con una vida nocturna importante.
Otra actividad muy común en el área es la pesca. La gran dársena, ubicada próxima a la carretera, del lado de Clearwater, tiene numerosas excursiones en barcos de paseo y en barcos de pesca con guía.
El golf es otra de las posibilidades de pasar un buen rato. Con docenas de canchas que ofrecen la oportunidad de practicar este deporte todo el año, el área de Tampa/St Pete/Clearwater es una especie de paraíso para los que disfrutan de este juego. Para los que gustan de presenciar espectáculos deportivos la zona ofrece fútbol americano de la NFL, jockey de la NHL, básquetbol de la NBA, fútbol (del nuestro) de la MLS, carreras de caballos, carreras de perros greyhound, y Jai Alai.
El parque Fort De Soto se compone de cinco islas interconectadas para un total de casi 500 hectáreas de belleza natural. Tiene cinco kilómetros de playas de arena blanca, humedales, aves e incluso un refugio de tortugas caguama.
El parque cuenta con una zona de 238 sitios de campamento para familias con instalaciones, un montón de áreas de picnic, dos grandes centros de natación con un área de concesión, y 10 kilómetros de camino pavimentado para explorar.
Se puede recorrer la fortaleza De Soto que data de 1898 que, aunque nunca fue el sitio de ninguna batalla, todavía conserva cuatro morteros de 12 pulgadas de estriado para cuidar la costa y dos de 6 pulgadas de estriado de tiro rápido Armstrong. Los observadores de aves seguramente se deleitarán al saber que existen 328 especies de aves para detectar en todo el parque.