Donald Trump, magnate inmobiliario y aspirante republicano a convertirse en el próximo presidente de Estados Unidos, sigue ganando enemigos con su verborragia. Ahora, se trata de una nueva promesa que posiblemente él mismo sabe que no podrá cumplir.
El republicano, que ya ha hecho olas más de una vez con sus espinosas declaraciones, ha apuntado contra Apple, la mayor empresa del mundo, para que fabrique sus productos en Estados Unidos, informó Expansión.
En un discurso en Liberty University (Virginia), Trump dijo: "Vamos a hacer que Apple produzca sus malditos ordenadores y sus cosas en este país en lugar de otros países".
El magnate no dio, sin embargo, detalles de cómo va convencer a Tim Cook, consejero delegado de Apple, de seguir sus planes, ni sobre cómo logrará que el gigante tecnológico equipare los costos de producción, que actualmente concentra mayoritariamente en China.
Sin embargo, según informaron varios medios de comunicación, antes de lanzarse a su carrera como candidato, Trump ya tenía a Apple entre ceja y ceja. A través de Facebook, el magnate dijo en 2013: "Tengo muchas acciones de Apple y echo de menos a Steve Jobs. Tim Cook debería aumentar inmediatamente el tamaño de la pantalla del iPhone".
Pese a su estilo agresivo, Trum sigue liderando las encuestas como candidato de los republicanos a sustituir a Barack Obama en la Casa Blanca, en las elecciones que se celebrarán en 2016.