La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, y el ministro de Seguridad bonaerense, Cristian Ritondo, realizaron un balance del operativo de búsqueda que permitió apresar a los sicarios Martín y Cristian Lanatta y Víctor Schillaci.
Bullrich fue contundente: "En el momento en el que estos tres delincuentes se van de la cárcel de General Alvear, hasta que son detenidos, se pueden encontrar momentos y hechos que demuestran que hay un hilo conductor de complicidades. De sectores que protegen, que desvían la investigación, que tienen lazos en distintos niveles".
Hubo un reclamo de los dos ministros, muy puntual: crear un protocolo para intervenir teléfonos de forma inmediata cuando se presente una situación protagonizada por criminales de alto riesgo.
"Estamos convencidos de que hubo complicidades políticas muy serias. Vamos a ir a fondo, no vamos a cubrir a nadie. Los autores reales del avance del a href="https://www.infobae.com/" rel="noopener noreferrer" narcotráfico/a tienen que pagar las consecuencias", dijo Bullrich.
Sobre el avance del narcotráfico en el país, destacó: "En todos lados hay laboratorios y complicidades. En todos lados hay que limpiar mucho. Hay que corroborar las conexiones políticas de la entrada masiva de la efedrina al país, que tuvo consecuencias y muertes. Hay responsables, funcionarios que convirtieron a la Argentina en una tierra liberada. Esa investigación hay que llevarla adelante: hay responsables políticos claros".
Por su parte, Ritondo dijo sobre la fuga: "Sin complicidad no se van, no hay droga en las cárceles, no se hacen secuestros virtuales. El Estado dejó a los agentes penitenciarios sin herramientas y con cárceles superpobladas. Hay un doble trabajo. Hay que recuperar a los que quieren trabajar bien".
Por último, agregó: "Luchar contra el narcotráfico significa luchar contra quienes manejan 6.000 millones de dólares de ganancia por año en Argentina. Vi a los Lanatta y Schillaci con miedo a las represalias".