Con pocos días de temporada teatral, en Villa Carlos Paz empezó a circular la versión de que a href="https://www.infobae.com/" rel="noopener noreferrer" Nacha Guevara/a estaba haciendo una serie de exigencias desmedidas a la producción de Stravaganza - sin reglas para el amor, el espectáculo que protagoniza. Una de las más polémicas era que no atendía a la prensa. Pero eso terminó en la noche del jueves 7 de enero: la ex jurado de Bailando 2015 habló con todos los corresponsales de los principales programas de espectáculos.
"Soy exigente, pero no de pelotudeces como ustedes dicen", respondió Nacha, sin filtro, refiriéndose a los supuestos caprichos que habría tenido como ensayar sola -sin técnicos ni compañeros de elenco-, que cambiaran una alfombra en el ingreso del Teatro Luxor porque estaba "cochina" y renovaran los sillones de su camarín, entre otras cosas.
La actriz aseguró que ella es de otra época, en la que no existía el juego mediático de estos tiempos: "No lo sé jugar y no lo quiero aprender". "Yo soy una diva cuando llego al escenario que es donde se debe ser diva. Mi vida no es un reality", agregó, aunque acotó que en su casa no tenía muchas comodidades. Mensaje para los productores.
Respecto a las críticas que llegaron desde algunas colegas, como Flor de la V que contó que ella no saludaba a sus compañeros. "No es mi costumbre ni será contestar a mis compañeros", contestó sobre eso. ¿Y qué dijo de Diego Reinhold que la liquidó con sus declaraciones? "Él puede decir lo que quiere. Es un país libre y democrático. Siempre que te agreden, te hieren".
La entrevista terminó con una selfie con todos los periodistas, una manera amable de cortar con las preguntas incómodas.