El presidente Mauricio Macri y el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, firmaron hoy la puesta en marcha del traspaso de la Policía Federal a la ciudad de Buenos Aires, con un acto en la Casa Rosada.
Larreta afirmó que el traspaso de parte de los efectivos de la Policía Federal a la órbita de la comuna "es un paso muy importante" ya que "va a ir mejorando un poquito cada día la seguridad" de la gente.
Al firmar el convenio con el presidente Mauricio Macri en la Casa Rosada, el funcionario remarcó que "la inseguridad es posiblemente la principal preocupación en la ciudad".
"Era un paso muy importante que la Ciudad maneje su propia policía", manifestó Rodríguez Larreta, quien añadió que es "un camino que va a ser largo" y que "acá no hay soluciones mágicas", aunque insistió que "este primer paso es fundamental".
Macri pidió además el compromiso de "volver a tener estadísticas públicas claras y confiables" respecto al delito, y aseguró que "la suma de capacidades existentes en la ciudad", y la coordinación de esfuerzos, "sí o sí va a dar resultados concretos para que la gente esté mejor".
"La integración va a ser ir hacia una única fuerza; esta tiene que volver a ser una de las ciudades más seguras del mundo y la Argentina el país donde podamos vivir tranquilos", enfatizó el Presidente.
Del acto participaron varios funcionarios del ámbito nacional y de la Ciudad, aunque los grandes ausentes fueron el jefe de la Policía Federal, Román Di Santo, y su segundo, Héctor Tebes. Fuentes policiales dejaron trascender que "no era necesario que estuvieran".
"Si hubiesen venido se vería como que la Policía está politizada, cuando su ley orgánica lo impide. No hay 'mala onda' entre el nuevo gobierno y la PFA", agregaron las fuentes del ámbito policial, aunque admitieron que "organicamente el tema del traspaso es muy complejo y el pulido final no está".