El ex jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, no descartó que la fuga de los hermanos Martín y Christian Lanatta, y de Víctor Squillaci Bonini -todos condenados a perpetua por el triple crimen de General Rodríguez- como una eventual recompensa por haberlo involucrado en el asesinato de tres jóvenes vinculados al negocio de la efedrina. Además, reiteró que "no tiene nada que ver" con los evadidos y aclaró que no pedirá custodia especial.