A cinco días del cambio de mando, el kirchnerismo y Cambiemos siguen enfrascados en una disputa por el lugar donde se realizará el acto en el que Mauricio Macri tomará posesión de la Presidencia. La actual gestión desoye los planteos del nuevo gobierno y avanza con la organización de la ceremonia en el Congreso, pero desde Cambiemos insisten en que se cumplan lo que a su entender indica el protocolo y la tradición.
Frente a la negativa oficial, el macrismo subió hoy el tono de sus cuestionamientos. "Se hará la jura en el Congreso y luego el presidente irá a la Casa Rosada, es una cuestión simbólica, no es algo necesarísimo para que el presidente sea presidente. Vamos a ser gobierno desde las 0 hs del 10 de diciembre, y si no se puede, no habrá traspaso de atributos", advirtió Gabriela Michetti.
En diálogo con el programa "Tormenta de Ideas", de MDZ Radio, la vicepresidente electa sostuvo que Cristina Kirchner "tiene la idea de tener un acto en el Congreso con la juventud de La Cámpora y todos los sectores que los han apoyado siempre, y hacer un acto de festejo a la presidenta saliente". Y añadió: "No lo podemos permitir, porque es un evento que se televisa al mundo entero".
"Es el traspaso de mando de la Casa del poder Ejecutivo, no puede ser un acto en el que se traspase al presidente entrante. Tenemos que ver que sea una cosa seria porque se trata de la imagen del país", indicó. No obstante sus críticas, la ex senadora no perdió la esperanza de que haya un cambio de opinión: "Sería esperable que la última gestualidad de la presidenta fuera razonable y republicana, porque desde el 10 de diciembre ella no manda, no tiene ninguna autoridad sobre la cosa pública, entonces hay que respetar la autoridad entrante".
Los cometarios de Michetti se sumaron a los que más temprano hizo el jefe de Gobierno porteño electo, Horacio Rodríguez Larreta, quien reiteró que la voluntad de a "tomar los atributos en la Rosada". Y añadió: "Lo lógico e institucional es que se los diese la Presidenta saliente", aunque reparó: "Si ella no quiere ir, tampoco la podemos obligar".
En tanto, el futuro presidente provisional del Senado, Federico Pinedo, afirmó que desde Cambiemos no tienen miedo que Macri sea insultado durante el acto de asunción en el Congreso, aunque lo que no quieren "es que se abochorne al presidente de la Argentina", por lo que advirtió que "si la ceremonia se transforma en una batalla campal", se dañará al "país".
"Puede haber incidentes si los dirigentes exacerban la confrontación, pero no incidentes con el Gobierno, sino privados", alertó Pinedo, y pidió "actuar con responsabilidad para que esto no pase".
"Nunca jamás se discutió algo así. Ni siquiera en momentos de traspaso muy conflictivos como en los traspasos de la dictadura a la democracia, o en 1989, con una hiperinflación", repasó y definió como "absurda" la controversia.
Impermeable a esos planteos, el Gobierno prosigue su marcha en la organización del traspaso de mando y la cesión de los atributos presidenciales - banda y bastón- en el Congreso. Así lo confirmó la Secretaría General de la Presidencia, que conduce Eduardo "Wado" de Pedro.
La dependencia ya giró invitaciones a gobernadores, cuerpo diplomático, gremios, cámaras empresarias, artistas, entre otras personalidades, y sigue ultimando detalles de la ceremonia con las autoridades salientes del Poder Legislativo, Amado Boudou y Julián Domínguez.
Además, la cuenta oficial de Twitter @CasaRosadaAR ratificó hoy lugar y horario.
div class="embed_cont type_freetext" id="embed55_wrap" rel="freetext">