En una carta abierta, el titular de la OEA afirmó que "cualquier grupo civil, especialmente aquellos que dependen del gobierno o del partido de gobierno" deberían ser desarmados ya que es "un imperativo cívico".
Almagro detalló que se refería "especialmente a estos últimos, porque supongo y espero que tenga influencia y poder sobre ellos, señor presidente. En cualquier caso, al país le haría bien despojar a la política de las armas y de la delincuencia".
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"Hoy, a una semana del acto electoral del 6D vuelvo a hacer un pedido en favor de la paz y de poner fin a la violencia en Venezuela. Los insultos y la impunidad, venga esta de donde venga, no pueden ser la respuesta a un clamor nacional e internacional de igualdad de derechos y justicia electoral", aseguró el ex canciller uruguayo en su carta.
Justamente, el escrito fue publicado tras los cruces con el presidente Nicolás Maduro quien llamó "basura" a Almagro en un acto oficial, luego que el titular de la OEA señalara al crimen del dirigente opositor Luis Manuel Díaz como una "herida de muerte a la democracia".
"No es ser basura, señor presidente Nicolás Maduro, condenar el asesinato de un político y hacer un llamado a detener ya la violencia en curso en el país", le respondió en su misiva.
En ese sentido, Almagro le sugirió a Maduro que "si no les consta (...) el miedo y la inseguridad de la oposición, entonces debería escucharlos para que se lo digan directamente".
Por último, secretario general de la OEA manifestó su esperanza de que "estos principios no nos separen", y aseguró la carta abierta no tenía por objetivo "ponerme a salvo de los intentos de insultarme, pero prefiero escuchar argumentos".