Pixee Fox de 25 años gastó USD 120 mil en unas 15 operaciones estéticas para retocarse la nariz, los ojos, los glúteos y para quitarse seis costillas para logrando así reducir al mínimo su cintura para resaltar su cuerpo.
La modelo dejó su trabajo de electricista en Suecia y se trasladó a Carolina del Norte, EEUU, para cumplir su sueño: "Estoy transformando a mí misma en un dibujo animado viviente", asegura en su blog personal.
Por eso cuando alguien se le acerca en la calle y le dice que parece una caricatura, ella asegura que no molesta y que se lo toma como un cumplido. "Eso es lo que quiero, mi logro", afirma Fox, quien para su remodelación corporal se ha inspirado en Jessica Rabbit, Aurora de La bella durmiente y Holli Would de Cool World.
Para Fox, estos personajes animados representan "la idealización del cuerpo femenino ", explicó al tabloide Daily Mail. "Quiero tener la cintura diminuta, el trasero, el busto y los ojos grandes y una cara muy bonita."
En la entrevista con el tabloide inglés, Fox contó que planea seguir su transformación en 2016. Esto incluirá implantes de cadera, implantes de pestañas y eliminación de grasa de sus mejillas.