En 1999, Paloma Herrera fue elegida por la revista Cheer & Dance, la más prestigiosa del medio entre los 10 bailarines del siglo XX. Y tiene sus argumentos ya que esta artista argentina bailó durante muchos años en la compañía American Ballet Theatre, la mejor de los Estados Unidos.
Luego de su despedida en mayo último con dicha compañía, comenzó una gira por el interior hasta su última gran actuación, que se llevó a cabo en la ciudad de Mendoza, lugar al que no iba desde 2007, este jueves 19 de noviembre en el teatro Independencia, que cumplía 90 años.
A las 21:15 comenzó a sonar la música sonó y el telón se abrió para inaugurar algo que muchos llamaron un capítulo clave en la historia de la danza: el vuelo final de Paloma.
Sobre el final, su novio Matías Elicagaray subió al escenario para darle un ramo blanco. También su mamá Marisa que le ofreció rosas rojas. Junto al Ballet Estable del Teatro Colón y a su partenaire, Juan Pablo Ledo, representaron Giselle de Adolphe Adam, un ícono del ballet romántico.
Fueron dos horas de espectáculo que el público disfrutó aplaudiendo de pie más de 15 minutos.