La Administración para el Control de Drogas de los Estados Unidos (DEA, por sus siglas en inglés) arrestó a dos sobrinos de la esposa del presidente venezolano, Cilia Flores, cuando intentaban trasportar 800 kilos de cocaína desde Haití hacia los Estados Unidos.
Efraín Campo Flores y Francisco Flores salieron en un avión privado desde Venezuela rumbo a Haití y, desde allí, buscaban cerrar el negocio para que esa cantidad de droga llegue a los EEUU.
Los movimientos realizados por ambos acusados en los preparativos de la operación pudieron ser filmados. Cuando el avión donde transportaban el cargamento de cocaína llegó a Puerto Príncipe, ambos fueron detenidos y entregados a la DEA, que se encargó de llevarlos a Nueva York para ponerlos ante la Justicia norteamericana.
Los Flores quisieron vender la droga a través de un agente encubierto de la DEA
La DEA tiende la trampa
La detención de los dos venezolanos se produjo gracias a los datos provenientes de varios informantes del departamento encargado del control antidrogas en los EEUU. Con el correr de las horas, se supo que los parientes de Maduro contactaron en octubre a un agente encubierto de la DEA en Honduras. Le pidieron ayuda para transportar los 800 kilos de cocaína a través de una isla de ese país, Roatán.
Una vez en Venezuela, los dos llevaron un kilo de cocaína -que supuestamente sería vendida en Nueva York- a otro informante confidencial para comprobar la calidad de la droga.
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