El pedido fue hecho a través de su abogado, Adrián Tenca, a la Sala III de apelaciones de San Isidro. Actualmente, Fernando Farré está en una cárcel de máxima seguridad con asistencia psiquiátrica y sus tres hijos están bajo tutela de la hermana de Claudia Schaefer, la víctima del violento asesinato ocurrido en agosto en el country de Martindale.
En caso de que le sea aceptado el pedido, Farré deberá ofrecer un lugar para quedarse, que podría ser un departamento que tiene. Además, tendrá que haber un familiar directo que salga de garante y se le podrían imponer condiciones como tener que presentarse en el juzgado con regularidad o en una comisaría cercana. Tampoco podría viajar al exterior y hasta podrían ponerle una tobillera electrónica para monitorearlo.
Pero no es simple que le concedan este beneficio. A Farré se le hicieron las primeras pericias psiquiátricas el 26 y 27 de octubre y luego el 3 y el 9 de noviembre. Para hoy estaban pautadas las pericias psicológicas con la jefa de los psicólogos del departamento judicial de San Isidro pero se postergaron.
El acusado confía en que en estas pericias aparezca un problema médico que lo habilite a cumplir su condena en un domicilio.
A Farré no le juega a favor que la fiscal de la causa, Carolina Carballida Calatayud, y el juez Nicolás Ceballos calificaron el hecho como homicidio agravado por el vínculo y podrían agregarle femicidio, lo que le significaría prisión perpetua.
El empresario, de 52 años, fue detenido el 21 de agosto pasado luego de degollar a su mujer, Claudia Schaefer, de 44, con un cuchillo casero. En total le produjo 74 puñaladas. Ocurrió el día que discutían los términos de la separación en su casa ubicada en el country de Martindale, en el partido bonaerense de Pilar.