Un "trapito" de 20 años permanecía hoy internado en grave estado tras ser baleado por un agente de la Policía Metropolitana en el barrio porteño de La Boca, donde su familia denunció que se trata de un caso de "gatillo fácil".
Sin embargo, María Eugenia Vidal dio una versión del hecho que se contrapone con la que dieron los allegados al herido, Lucas Cabello, que pelea por su vida en el Hospital Argerich.
En una improvisada rueda de prensa en la localidad de Avellaneda, la dirigente del gobierno porteño aseguró que el agente de seguridad intervino en un episodio que "en origen es un caso de violencia de género".
"Se le había dado un botón antipánico a la pareja de esta persona y se agregó una consigna policial, para otorgarle protección a la mujer", contó Vidal en declaraciones a los medios de comunicación.
"Ella salió de su casa gritando, con el dato de que había denunciado que su pareja la había amenazado de muerte, y el agente le dio a él la voz de alto, pero (el muchacho) no atendió el pedido y ahí se generó la reacción de la policía", relató la funcionaria
Al respecto, Vidal remarcó: "Es importante aclarar que esto no se dio porque el policía estaba ahí de casualidad, sino por un caso de violencia doméstica: había una denuncia, la mujer tenía un botón antipánico y el policía estaba protegiéndola".
Finalmente, la futura gobernadora de la provincia de Buenos Aires aclaró que "de todas maneras, el agente está disposición de la Justicia, que es la que va a determinar los pasos a seguir".