Máximo Kirchner ingresó este sábado por la tarde al Sanatorio Otamendi de la ciudad de Buenos Aires donde fue intervenido para extraerle un quiste del abdomen.
La primera información refería que el diputado electo había concurrido a la clínica donde suele atenderse Cristina Kirchner y su familia por un dolor en la zona del hígado. Al cabo de una serie de estudios, los médicos le realizaron una punción en la zona afectada y le colocaron un drenaje, para luego retirarle el quiste.
El hijo de la Presidente está fuera de peligro y permanecerá internado. Lo acompañan la mandataria y otros familiares.
La dirección del Sanatorio Otamendi informó que "el diputado nacional electo Máximo Kirchner ha sido internado en el sanatorio el día de la fecha con diagnóstico de absceso hepático origen diverticular.
Por tal motivo se le realizó un drenaje percuteano que ha sido exitoso".
Según trascendió, el paciente será tratado con antibióticos en las próximas semanas, mientras que se realizarán estudios tendientes a detectar el origen de la afección.
El absceso hepático es una masa llena de pus dentro o asociada al hígado, y entre sus causas más comunes se encuentran las infecciones abdominales, (apendicitis y diverticulitis); una enfermedad inflamatoria intestinal, un intestino perforado, infecciones sistémicas (endocarditis bacteriana) o la manipulación del tracto biliar.
Ubicado en el barrio de Recoleta, el sanatorio es el lugar en el que suele atenderse Cristina Kirchner y su familia. La semana pasada, la mandataria y su hija, Florencia, se realizaron allí una serie de chequeos.
Según supo Infobae en ese entonces, Florencia fue atendida por un traumatólogo mientras que la Presidente se realizó exámenes de rutina y una mamografía.