La exitosa carrera deportiva de Karim Benzema no se compara con su trayectoria jurídica, que deja mucho que desear. El delantero francés desembarcó en el Real Madrid hace seis años y, desde entonces, tuvo que lidiar con varios problemas policiales. Algunos más graves que otros. Sus incidentes con la justicia española y francesa son cada vez más habituales.
El atacante de 27 años estuvo involucrado en diferentes tipos de incidentes con la Polícia. Desde los choques hasta la prostitución de menores, con escala en los excesos de velocidad y el manejo de vehículos sin licencia de conducir.
Su primer encuentro con la ley fue el 1 diciembre de 2009, cuando estrelló su Audi Q7 en Madrid. Llevaba pocos meses como jugador del club blanco, cuando Benzema chocó su camioneta en la localidad de Pozuelo de Alarcón.
Días más tarde, se trasladó a su país para pasar la Navidad. El 24 de diciembre el jugador sufrió un pequeño accidente de circulación en la isla Reunión, situada al este de Madagascar, en pleno océano Índico, cuando en la madrugada salía de un club nocturno donde celebró su cumpleaños.
Pero tras esos accidentes automovilísticos, llegó su primer gran problema con la justicia. El 10 de julio de 2010 fue imputado junto a su compatriota Franck Ribéry por contratar a una prostituta menor de edad, de nombre Zahia. Después de casi cuatro años de intensos juicios, el Tribunal Correccional de París absolvió a ambos deportistas por considerar que desconocían la edad de la joven.
Al año siguiente, el 16 de junio, volvió a sus líos con los coches. Fue multado por participar de carreras ilegales con su Porsche en el centro de Ibiza. Luego de ser interceptado por las autoridades policiales el jugador pagó al contado la multa de 250 euros.
Dos año más tarde, tuvo un nuevo problema, esta vez por exceder la velocidad. El 3 de febrero de 2013 fue fotografiado por un radar cuando circulaba a 214 kilómetros por hora cerca de La Finca, uno de los barrios más exclusivos de Madrid. La zona, donde viven varios futbolistas y celebridades, tiene un límite de 100 km/h. Benzema pasó por un juicio rápido y pagó una multa de 18.000 euros. También le quitaron el carnet de conducir por ocho meses.
Este año, protagonizó sus dos últimas andanzas, ambas del mismo tenor. En mayo de 2015, la Policía Municipal lo detuvo en un control rutinario y descubrieron que transitaba sin carnet de conducir, por lo que su turismo fue inmovilizado. Benzema enseñó la documentación del vehículo, pero no mostró nada que acreditara que podía conducir.
El acompañante de Karim se hizo cargo del vehículo y ambos pudieron continuar su trayecto, después de que los agentes le entregaran la documentación como imputado por un delito contra la seguridad vial.
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