La Marina de México rescató en la costa de Chiapas (sureste) a cuatro pescadores de Ecuador y Colombia que aparentemente salieron en una embarcación pequeña de la costa ecuatoriana y llevaban más de 30 días a la deriva, informó este domingo la institución.
El rescate tuvo lugar el sábado a 260 kilómetros al suroeste del puerto de Chiapas después de que un avión de patrulla marítima avistó en un vuelo nocturno "una embarcación menor a la deriva con cuatro tripulantes que agitaban los brazos en señal de auxilio".
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Inmediatamente se instruyó al buque Patrulla Oceánica ir a su rescate, añadió.
El buque ubicó a la deriva la embarcación "El Pregón" y rescató a sus cuatro tripulantes: dos ecuatorianos de 26 y 42 años y dos colombianos de 28 y 34 años.
"Los náufragos manifestaron que zarparon del puerto de Esmeraldas, Ecuador, el 24 de septiembre y que se perdieron en altamar mientras pescaban", dice el comunicado.
La pequeña embarcación quedó "a la deriva el primero de octubre al terminarse el combustible cuando trataban de regresar a puerto, por lo que fueron arrastrados por la corriente hasta llegar a aguas mexicanas", según su propio relato.
El personal naval mexicano ofreció atención médica a los pescadores y les dio agua y comida, ya que "todos mostraban un cuadro clínico de deshidratación tras haber pasado 30 días en altamar".
Los cuatro pescadores fueron trasladados a las instalaciones del Instituto Nacional de Migración en Tapachula, Chiapas.
El pasado 30 de enero el pescador salvadoreño José Salvador Alvarenga, de 37 años, apareció semidesnudo y con el pelo y la barba crecidos en el atolón Ebon, en el sur de las Islas Marshall, asegurando haber sobrevivido un año a la deriva.
Alvarenga sostuvo que había salido a pescar tiburones en diciembre de 2012 desde la costa de Chiapas junto al mexicano Ezequiel Córdoba, de 24 años, pero que por una avería en el motor su embarcación quedó a la deriva y apareció a 12.500 km de distancia de su punto de partida un año después.
El hombre contó que sobrevivió comiendo aves y pescado crudos y bebiendo sangre de tortuga y su propia orina pero su compañero murió a los cuatro meses, incapaz de soportar esa dieta, y tuvo que arrojar su cuerpo al mar.