Con un tono claro y contundente análisis, carente de números, pero sustentado en la historia argentina desde fines de los 50, Juan Carlos de Pablo destacó ante un auditorio con más de 500 ejecutivos de las finanzas locales e internacionales que "el nuevo Gobierno asumirá con los stocks agotados, por eso recuperarlos será lo más importante, porque no habrá más de donde sacar".
Así, en alusión al sostenido drenaje de las reservas en divisas en el Banco Central, y una composición cada vez más dudosa por la magnitud de la contrapartida en abultados pasivos, como el canje de monedas con China por más de USD 11.000 millones, los atrasos de autorizaciones de pagos a proveedores de importadores y giros de dividendos al exterior, más vencimientos de la deuda pública, mientras el saldo de la balanza comercial ya pasó a ser negativo en unos USD 2.000 millones.
Juan Carlos de Pablo: "El nuevo Gobierno asumirá con todos los stocks agotados"
"La situación es contundente y promete una corrección dura. Por eso el 10 de diciembre debe haber un plan económico que resulte creíble para los agentes económicos, antes de intentar llegar a un acuerdo con los holdouts. Las prioridades deberán ser recuperar el INDEC y tomar medidas de shock, porque no hay experiencias exitosas con medidas gradualistas", dijo uno de los economistas de mayor trayectoria en la Argentina en el 10º Foro Económico y Financiero de Thomson Reuters.
Escenario internacional no tan negativo
En una mesa en la que también participó el economista experto en el análisis de los mercados emergentes internacionales, Marcos Buscaglia, De Pablo manifestó su preocupación por la crisis que afecta a Brasil, porque "es muy grande, está en dificultades, tiene una presidente cuestionada y un ministro idóneo al que le rechazan la mitad de las medidas y la otra mitad que le aprueba el Congreso no se las cree".
En esa línea Buscaglia dijo que más allá de los problemas claros de Brasil "Hay mucho pesimismo afuera sobre la economía global que no se corresponden con las estimaciones de crecimiento, que sólo indican una desaceleración y una convergencia entre menores tasas de aumento de las economías emergentes y las esperadas para los países desarrollados".
En el caso particular de la Argentina el especialista se mostró confiado en que "una vez que los países emergentes completen el ajuste cambiario, para defender la posición de reservas en divisas, el escenario va a mejorar. Aunque la caída esperada del riesgo país estará condicionada por la baja posición de reservas inicial". Recomendó ser muy cuidadoso con la emisión de bonos de la deuda para pagar los compromisos con los holdouts y también con la economía real, como importadores y empresas que acusan atrasos en los giros de dividendos al exterior.