La crisis de refugiados que golpea a Europa no da tregua. Miles de personas continúan arriesgando sus vidas y las de sus familias en travesías por tierra y por mar mientras huyen de la guerra y los crisis políticas en sus países de origen. Ahora, la llegada del invierno complica aún más los trayectos elegidos por los migrantes.
Esta vez, el drama ha convertido a un pescador turco en un héroe, al rescatar de las aguas del Mar Egeo a un pequeño sirio de 18 meses de edad. El momento ha sido registrado por una persona que se encontraba en el mismo barco con un celular.
"¡Está vivo! ¡Está vivo!"
En las imágenes puede verse cuando el pescador, identificado como Recep Evran, sube a su bote al pequeño niño, que se encuentra flotando gracias a un salvavidas, mientras se oye la voz de la persona detrás de la cámara que exclama: "¡Está vivo! ¡Está vivo!".
Evran dijo más tarde al Hurriyet Daily News: "Estaba pálido. Nosotros pensamos que sufría hipotermia porque estaba muy frío y sus pies y manos estaban demasiado blancas. Además le salía espuma por la boca".
"Estaba pálido. Nosotros pensamos que sufría hipotermia porque estaba muy frío y sus pies y manos estaban demasiado blancas"
De acuerdo con un artículo de Daily Mail, el niño estaba flotando hace largas horas en el agua con varias mujeres, una de las cuales estaba embarazada, cuando el pescador turco los rescató. El niño, que más tarde fue identificado como Muhammad Hasan, fue trasladado al hospital donde fue estabilizado y ya se encuentra fuera de peligro.
En el episodio fueron rescatadas unas 15 personas y otras 15 continúan desaparecidas.
Niños y refugiados
Es que los niños han resultado ser los más vulnerables en las odiseas emprendidas por sus familias. La semana pasada tres niños y un bebé fueron hallados ahogados en costas griegas, aparentemente como consecuencia del hundimiento de una pequeña embarcación de madera en la que viajaban junto a otras personas.
Antes de eso, el pequeño de 3 años Aylan Kurdi, que murió ahogado el 2 de septiembre cuando él y su familia intentaban llegar a Europa, se convirtió con una fotografía en la imagen de la vergüenza, al tiempo que abrió el debate sobre cómo está manejando Europa la crisis migratoria.
Según el Alto Comisionado para los Refugiados de la ONU (Acnur), unos 575.500 migrantes atravesaron desde enero el Mediterráneo para llegar a Europa y más de 3.000 murieron ahogados en el intento. Se trata de la mayor ola migratoria en el continente desde la Segunda Guerra Mundial.