S.O.S.: al cuidado del agua

Un recorrido por el funcionamiento del sistema de agua en la ciudad de Buenos Aires, para comprender la importancia de su cuidado

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En Costanera Norte se pueden advertir una suerte de "casitas misteriosas" donde se encuentra la Toma 3. Se trata de las tres torres que emergen del agua de vital importancia, ya que es son las tomas de agua donde se capta todo el fluido que luego será potabilizado en la ciudad. Esas tomas son las que permiten abastecer de agua a más de cinco millones de personas en Buenos Aires y 17 municipios aledaños. Si por alguna razón una de ellas dejara de funcionar, las reservas de agua permitirían el abastecimiento por sólo una hora.


¿Cómo se lleva a cabo este proceso tan importante? El agua ingresa a cada toma por unas ventanas enrejadas que se ubican en cada uno de sus ocho laterales. Luego de pasar por una serie de filtros, llega a un caño de hormigón que funciona de conector hacia la planta potabilizadora.


Durante el trayecto se llevan a cabo diferentes estudios en el líquido, como sus parámetros de turbiedad, la acidez y la temperatura. Los valores que se obtienen en una computadora se transmiten automáticamente a la Planta Central. Además, se toman muestras de agua que se analizan con mayor profundidad luego.


Cuando el agua llega a la planta potabilizadora, se bombea varios metros para arriba a fin de aprovechar la fuerza de la gravedad para que el proceso de purificación se desarrolle hacia abajo. Para que el funcionamiento de las bombas sea posible existe un cableado eléctrico colocado especialmente para tal fin.


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De este modo, el proceso de llevar agua a una población es costoso, dada toda la infraestructura que requiere, y consume energía para alcanzar los objetivos.


El Riachuelo

Uno de los problemas más conocidos a nivel nacional es el de la cuenca Matanza-Riachuelo. Junto con el Reconquista, se trata de uno de los ríos más contaminados de Argentina.


Para dar respuesta a esta problemática, y producto de la presión de diferentes organizaciones no gubernamentales, se dio lugar a la creación de la Autoridad de la Cuenca Matanza Riachuelo (Acumar). Se trata de un ente que unifica todas las jurisdicciones por las que pasa el curso del Riachuelo y que tiene el objetivo de buscar soluciones y tomar acciones entre los diferentes actores involucrados.

Para esta labor, es importante que estos diferentes actores unifiquen criterios respecto de qué entienden por saneamiento. ¿Es sólo que no haya fuentes de contaminación ene l río? ¿O también implica considerar otras cuestiones más amplias, como el cambio en las modalidades de producción, el cambio en los hábitos de la población, el buen manejo de residuos y el ordenamiento del territorio?


Cambio de hábitos

Independientemente de lo que se haga a nivel gubernamental o empresarial, cada ciudadano también puede también asumir su rol de importancia. Un primer paso es la concientización y diálogo conjunto con amigos, vecinos o familiares.


Luego hay otras acciones más concretas que se pueden implementar en el día a día, como no dejar el agua corriendo, convencer al encargado del edificio para reemplace la manguera por el balde al baldear la vereda (el uso de la manguera consume 250 litros cada media hora), y no dejar la canilla abierta al lavar los platos (se pueden llegar a gastar hasta 30 litros por cada vez).


Algunas cifras

La Organización de las Naciones Unidas (ONU) propone un consumo diario de 120 litros por persona. Sin embargo, en Inglaterra, por ejemplo, dicho consumo es de 150 litros. ¿Cómo saber cuánto consume uno? Un ejemplo para graficar la situación: si en un día una persona se da una ducha de 10 minutos, realiza cuatro descargas del inodoro, toma dos litros de bebida, cocina tres minutos con agua, lava 10 minutos y se cepilla los dientes en un minuto; está utilizando en total 190 litros por día, o 5.700 litros al mes, o 69.350 litros al año.


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El mayor consumo en el hogar se encuentra en el baño, especialmente a partir del uso de la descarga de inodoros y la ducha. Para mejorar la situación, se aconseja arreglar cualquier tipo de pérdida que pueda tener la canilla, abrir la canilla sólo cuando sea necesario (por ejemplo al lavarse los dientes, abrirla sólo para enjuagarse) y bañarse en el menor tiempo posible cada día (siempre en modo ducha y no baño de inmersión, que consume mayor cantidad de agua).


Además, hoy las industrias han implementado nuevas tecnologías para ofrecer productos inteligentes. Tal es el caso del inodoro con doble botón descarga que ofrece dos opciones con distintas cantidades de agua por descarga, conforme la necesidad puntual del individuo.


Otra de las opciones "más caseras", es colocar en la cisterna del inodoro una botella con agua, lejos de la válvula. Esto permitirá ocuparle espacio al agua y ahorrar el consumo de la misma, que puede llegar a reducirse en unos tres o cuatro litros.


La importancia del cuidado del agua en el hogar sólo encuentra explicación en esta cifra que aún estremece: una de cada cinco personas en el mundo no tiene acceso a agua potable y segura. Y ello conlleva otras problemáticas asociadas, vinculadas con la salud, el desarrollo y la contaminación ambiental.

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