El dramático testimonio de una ex paciente de Aníbal Lotocki: "Me destrozó la vida"

Mariela Cardozo contó los padecimientos que sufrió luego de una operación con el polémico doctor

a href="https://www.infobae.com/" rel="noopener noreferrer" Aníbal Lotocki/a volvió a estar en la lupa de los medios a través del caso de a href="URL_AGRUPADOR_162/gabriela-trenchi-a10895" rel="noopener noreferrer" Gabriela Trenchi/a, que estuvo en terapia intensiva tras una intervención quirúrgica. El miércoles 21, la mujer habló por primera vez, dijo que está recuperándose y que aún tiene parálisis facial.

Este jueves, se sumó una nueva víctima de este doctor. Se trata Mariela Cardozo, una nutricionista que fue operada por él y que las consecuencias le provocaron una trombosis venosa profunda, corriendo riesgo su vida hasta el día de hoy. "Estaba en una guardia del Otamendi y me enteré de lo que le había pasado a Gabriela Trenchi", contó en diálogo con Intrusos.

Nutricionista nacida en Misiones, se realizó una lipoescultura en las rodillas. "Él te dice 'te hago un retoquecito, te saco un poquito de acá, vos dejame a mí' y uno confía. Me sacó cinco litros de grasas. Que no está permitido sacarlo en una sola cirugía. Se produce una masa sanguínea y aumenta los riesgos de infecciones", contó.

La intervención quirúrgica -que tuvo un costo de 36 mil pesos- duró tres horas y media pero, según contó, a la media hora le dieron el alta. "Entró al quirófano tomando un café y sin barbijo. Había una enfermera toda maquillada, una chica hermosa que estaba toda pintada. Parecía una película. Y te digo más: yo no vi ningún anestesista", explicó y luego agregó: "Cuando salí del lugar empecé a perder sangre a chorros. Le manché todo el tapizado del auto a mi amiga".

"Cada vez que le escribía me decía: 'bueno, tomate un corticoide'. Si esto le pasa a una chica que atiende un local de ropa y no trabaja en la nutrición, no estaría acá sentada hablando. Y doy gracias a Dios que no me tocó la cara".

"Sigo con la trombosis venosa profunda. Se llega a desprender un coágulo, me tapa un pulmón y puede provocarme la muerte", dijo y concluyó: "No tengo más infección, gracias a Dios terminé con los antibióticos pero me destrozó la vida".