El comandante militar de mayor importancia de Hezbollah que fue abatido durante los enfrentamientos con los rebeldes sirios fue enterrado con honores militares este lunes en la aldea libanesa de Al Luwaizeh.
Hassan Al Haj murió en la provincia de Idlib, en el noroeste de Siria, donde la organización terrorista está luchando junto a Irán contra los rebeldes que se oponen al régimen sirio de Bashar Al Assad.
"Él es la figura más importante que murió en combate en Siria desde el inicio de la guerra", señaló un funcionario libanés, quien habló en condición de anonimato.
"No eras sólo un funcionario, ni meramente un director o jefe de operaciones. Usted fue un líder de pura calidad, un ejemplo y modelo para todos sus hermanos y muyahidines queridos ", indicó el líder de Hezbollah, Sayyed Hashem Safieddin, en un mensaje transmitido por Al-Manar TV.
El féretro fue conducido por las ciudades del sur del Líbano, bastión del grupo terrorista, en medio de una caravana de coches negros y ambulancias. Luego fue llevado a la ciudad natal de Al Haj, en Al Luwaizaeh, región de Tuffah, seguido por una multitud que se hizo presente para despedir al comandante terrorista.
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Cientos de combatientes de Hezbollah despidieron a su comandante vestidos con uniformes militares. En el entierro también hubo música solemne de trompeta y el ataúd estuvo cubierto con una bandera amarilla de la organización extremista, según consigna Al Arabiya.
La estación televisiva partidaria Al Manar homenajeó al comandante asesinado, quien durante 20 años comandó las batallas contra Israel en el sur del Líbano.
"Participó en la mayor parte de las operaciones de la yihad, especialmente en la década de 1980 cuando era comandante de la región Tuffah", señaló Al Manar.