Manuel Romero Victorica integra el estudio que patrocina a la doctora Sandra Arroyo Salgado, representante de las hijas menores del fiscal Alberto Nisman, acreditadas como querella en la investigación judicial. Cree que Viviana Fein no tiene mala fe en su accionar pero considera que la magistrada "puso el carro delante del caballo". Para él, la abogada del ministerio público se formó desde el primer momento la idea de que el titular de la UFI Amia se suicidó y se niega a considerar otra apreciación de los hechos.
En diálogo con InfobaeTV, Romero Victorica dijo que las pruebas de presencia de resto de pólvora en las manos de Nisman y la pericial de huellas dactilares son determinantes en la causa. Aquí, parte del diálogo:
i- Con la prueba producida hasta hoy, ¿se puede cerrar la hipótesis de si es suicidio u homicidio lo ocurrido el 18 de enero pasado?br//iPara mí, claramente, se puede concluir que hay más que suficientes pruebas para determinar que estamos en presencia de un homicidio. Y nos basamos en pruebas científicas y en prueba de concepto también. Las pruebas no se evalúan o valoran de forma aislada. El plexo probatorio es el conjunto de pruebas del proceso y básicamente tenemos dos pruebas científicas irrefutables que la fiscalía tiene intención de desacreditar.
i-¿Cuáles son?br//iMe refiero a la que se tomó con las manos del fiscal para determinar si existían restos de residuos de disparos. En la que se hizo al momento del crimen se concluyó que no había restos de bario, plomo y antimonio. Por otro lado, se hizo recientemente en Salta, con la más alta tecnología del país, la simulación del disparo en tres hipótesis: se reprodujo el cuerpo del fiscal y los rastros se tomaron inmediatamente al disparo, a las 10 horas y a las 20 horas. En los tres momentos existieron cientos de residuos de esos metales. La conclusión es evidente: si en las manos del fiscal no había residuos y si la prueba de Salta demuestra que sí deja restos, Nisman no disparó el arma. A él lo mataron.
i- La fiscal sostiene que no encuentra prueba de presencia de otra persona en el bañobr//i¡Claro que no lo va a encontrar! Porque quien fue a matar al fiscal Nisnam no fue cualquiera. Son profesionales, habrán tomado todos los recaudos para no dejar rastros. No se encontró ni un pelo, ni una huella ni nada en el departamento. Y ese es el otro tema. Encontraron sólo cinco huellas dactilares. Dos del fiscal Nisman y tres que no se pueden determinar. Si en un departamento en donde concurrían, cuanto menos, la empleada doméstica, la madre del fiscal, la secretaria doctora Castro, el asesor de medios Rabinovich, iba la custodia, iría alguna otra persona como va a cualquier casa, ¿de nadie recogieron huellas? ¿Nisman le ponía guantes a las personas antes de entrar a su casa?
i- ¿Usted sostiene la teoría de que hubo un homicida sofisticado que mató y limpió prolija y profesionalmente todo el departamento?br//iLas pruebas nos llevan a concluir eso. Y habría que agregar cosas como que el reloj de la computadora de Nisman fue alterado, la limpieza que se hizo de los archivos de Windows, el teléfono vaciado ex profeso de los registros de llamadas y tanto más. Todo probado en el expediente.
- ¿Para usted es descabellada la hipótesis de suicidio inducido?br/El que habla es el expediente. A esto lo he discutido mucho con la fiscal Fein y a ella le he dicho: Dígame alguna prueba que nos lleve al suicidio inducido. Muéstreme una. Una nota, un mail de amenaza, algo. Yo le puedo mostrar las que concluyen que es homicidio. Pero de suicidio no hay una sola.
- ¿Con Fein tiene solo diferencias de criterio jurídico o cree que ella incurre en mala fe?br/No puedo estar pensando en la mala fe de la fiscal. Sí, como se dice en criollo, "puso el carro delante del caballo". Se forjó una hipótesis de que era suicidio y trabajó en ese sentido. Pero a las hijas de Nisman hay que decirles la verdad. Si fue suicidio, lo será. Pero si es homicidio, fue homicidio. Y yo estoy convencido de esto último.