El músico, condenado a cinco años de cárcel por cohecho activo, lamentó el fallo y dijo en diálogo con Vorterix que en el fondo esperaba que la Cámara modificara algo, aunque expresó que "desde hace tiempo está resignado".
"Los únicos giles que estamos ahí somos nosotros. Este país funciona así, alguien tiene que pagar. Yo ya me vengo haciendo la cabeza. Estoy pensando en que esto no se iba a revertir. No tienen las ganas de ver qué es lo que pasó. Encima los padres, buscaron venganza y no justicia. Y lo consiguieron", criticó el músico de Callejeros.
Aclaró que no son todos los padres los que "lucraron con la muerte de sus hijos". "Algunos están cobrando del Gobierno. Esto salió en el Boletín Oficial. Están cobrando un dinero por mes. Hace diez años conocí a los padres. A algunos hoy los vi diferentes. Más contentos. Cambiaron de auto. De marido, de casa. Eso me indigna y me pone muy mal. Me da mucha tristeza", dijo Djerfy.
Asimismo, expresó su molestia por la extensión del proceso y dijo que prefiere ir preso cuanto antes para terminar de cumplir la pena decretada por la Justicia. "Cuando me digan, voy, cumplo y se terminó. No quiero saber más nada con esto. No siento culpa de nada. Quiero que esto termine", agregó. "Voy a ser papá en marzo. Mis viejos ya están grandes. Sigo adelante como puedo", expresó.
Reiteró que la banda no fue culpable de lo ocurrido aquel 30 de diciembre de 2004 en el boliche de Once y que la tragedia los involucró por obra del azar. "Duermo tranquilo todas las noches. Yo tocaba la guitarra. Fue una granada que pasó de mano en mano y nos explotó a nosotros. El local estaba abierto y fuimos a tocar. Pensábamos que estaba todo bien. Nos dijeron que entraba tal cantidad de gente y le creímos a (Omar) Chabán. No somos expertos en seguridad ni en sanidad", se defendió. Responsabilidad tenemos porque fuimos a tocar pero no culpa. Llevamos a nuestras familias a tocar ahí. Perdí a cinco familiares", finalizó.
Ayer, los jueces Juan Carlos Gemignani, Gustavo M. Hornos y Pedro R. David de la Sala IV de la Cámara Federal de Casación Penal ratificaron las condenas impuestas en 2012 a los integrantes de Callejeros, así como a Raúl Villarreal (asistente del gerenciador de Cromañón, Omar Chabán) y a los funcionarios Fabiana Fiszbin, Ana Fernández y Gustavo Torres por omisión de sus deberes.
En cuanto a los músicos Patricio "Pato" Fontanet (condenado a siete años de prisión), Cristian Torrejón, Maximiliano Djerfi, Elio Delgado y Juan Alberto Carbone (condenados a cinco años de prisión), la Justicia decidió que seguirán en libertad hasta tanto Casación decida si el expediente debe ser revisado o no por la Corte Suprema de Justicia.