La prestigiosa ONU-Hábitat tomó como parámetro una recomendación de la Organización Mundial de la Salud (OMS) para establecer en su informe "El estado de las ciudades de América Latina y el Caribe 2012" que las urbes deberían disponer de un mínimo de entre nueve y once metros cuadrados de espacios verdes por habitante.
En América del Sur, la ciudad emblemática en cuanto a densidad de espacios verdes es la brasileña Curitiba con 51,3 m2/habitante. Otras ciudades brasileñas que cumplen con el mínimo recomendado son Porto Alegre (13,62), São Paulo (11,58) y Belo Horizonte (9,4) También la capital uruguaya Montevideo (12,68) y la ciudad santafesina de Rosario (10,4) cumplen con estos mínimos saludables.
Los números de la Dirección General de Estadística y Censos del Ministerio de Hacienda porteño publicados recientemente muestran que la proporción de espacios verdes por habitante bajó de 6 m2/habitante en 2006 a 5,9 en 2014. Parecería a primera vista una pérdida poco significativa, pero como el macrismo empezó su gestión con un número ya bajísimo y lejano a la recomendación de la OMS y otros organismos internacionales, esta nueva disminución en ocho años de gestión merece mucha atención.
Los números oficiales intentan disimular este déficit cambiando las unidades en que se expresan los datos: lo hacen en hectáreas cada mil habitantes cuando lo que se utiliza en los estudios comparativos son metros cuadrados/habitante. Esta pequeña trampa intenta inflar los números oficiales y dificultar las comparaciones entre diferentes ciudades o entre distintas investigaciones.
Si tomamos por separado las comunas vemos además que hay una distribución sumamente desigual de los espacios verdes en las mismas, por lo que podemos clasificarlas en tres grupos:
a) las que cumplen con el mínimo recomendado (más de 9 m2/habitante): Comuna 1 (Retiro, San Nicolás, Puerto Madero, San Telmo, Monserrat y Constitución), Comuna 8 (Villa Soldati, Villa Riachuelo y Villa Lugano) y Comuna 14 (Palermo);
b) las que registran una baja superficie de espacios verdes (entre 9 y 5 m2/habitante): Comuna 9 (Parque Avellaneda, Liniers y Mataderos), Comuna 12 (Coghlan, Saavedra, Villa Urquiza y Villa Pueyrredón) y Comuna 13 (Belgrano, Núñez y Colegiales)
c) las que tienen muy baja superficie de espacios verdes (menos de 5 m2/habitante): el resto de las Comunas: las Comunas 3 (San Cristóbal y Balvanera) y 5 (Almagro y Boedo) son las que se encuentran en peor situación con 0,5 y 0,2 m2/habitante respectivamente.
La Comuna 1 es la que mejor relación tiene (22,9 m2/habitante) ya que cuenta en su haber con los jardines de la Costanera Sur, las plazas de Puerto Madero y las 353 hectáreas de la Reserva Ecológica. De todos modos en esta zona también se perdió superficie verde ya que en el 2006 se contaba con 24,4 m2/habitante, lo que implica una reducción de espacios verdes del 6%.
La Comuna 8 también cumple con los mínimos saludables (14,7 m2/habitante) gracias a las 154 ha del Parque Roca, a las que se suman las 120 ha del Parque Indoamericano. Sin embargo, durante la actual gestión la incesante cementación de los espacios verdes del sur de la ciudad muestra como resultado una reducción significativa. En el año 2006 la Comuna 8 contaba con 22,2 m2/habitante, lo que implica una reducción del 33% de sus espacios verdes en ocho años.
Las comunas de la zona norte de la ciudad corren una mejor suerte. La Comuna 14 (Palermo) no sólo supera el mínimo saludable (12,1 m2/habitante) sino que ha incrementado su superficie de espacios verdes. En el año 2006 esa comuna contaba 8,4 m2/habitante, mostrando entonces un aumento en espacios verdes del 31% entre 2006 y 2014.
En los últimos tiempos, vecinos de comunas con muy baja densidad de espacios verdes han comenzado a resistir los avances de la construcción indiscriminada a expensas de los mismos. Vecinos de la Comuna 7 (Parque Chacabuco y Flores), que cuenta con apenas 1,8 m2/habitante, luchan porque el Parque Chacabuco no sea el primer espacio verde en el que se establezca un bar, según la ley sancionada en 2014 en la Legislatura Porteña. Este Parque contaba con 20 ha de espacio verde cuando inauguró y ahora cuenta con apenas 8.
Por su parte, vecinos de la Comuna 6 (Caballito), que cuenta con un escaso 1,5 m2/habitante, se encuentran hace años en estado de alerta y movilización para evitar que la empresa IRSA construya un gigantesco centro comercial en terrenos linderos al estadio de Ferrocarril Oeste.