Audi y Porsche acapararon las miradas en el Salón del Automóvil de Fráncfort.
Allí, Audi presentó un prototipo bautizado e-tron quattro, que prefigura una todoterreno totalmente eléctrica, con la intención de lanzar su venta en 2018. Y Porsche, también del grupo Volkswagen, causó sensación con su Mission E, un deportivo eléctrico de formas fluidas y futuristas.
Sus formas no son lo único que llamó la atención. Con una recarga de 15 minutos la batería se llena al 80% y ofrece una autonomía de 400 kilómetros. Va de 0 a 100 kilómetros por hora en 3,5 segundos y hasta los 200 en poco menos de 12 segundos.
Volkswagen promete una autonomía de 500 km para ambos vehículos, en tanto que el modelo de Audi ya fue bautizado por la prensa especializada como "el asesino de Tesla".
La marca de los anillos no se siente incómoda con ese apodo, como si quisiera "demostrar que no va a dejarse pasar por encima por Tesla", una marca hasta ahora sin competencia en el segmento de la alta gama.
De hecho, Audi presentó su espécimen poco antes de que la empresa californiana lanzara su crossover Model X, ausente en el Salón de Fráncfort.
El Model X, lanzado después de la berlina Model S de 2012, reivindica igualmente una autonomía de 500 k.
Pero tanto el Model S como el Model X están reservados a los más pudientes, dado que cuestan de 70.000 a 140.000 dólares. El presidente de Tesla, Elon Musk, no está dispuesto sin embargo a ceder los otros segmentos del mercado, y prometió lanzar dentro de dos años el Model 3, una berlina que se comercializará a unos 35.000 dólares.
El coche eléctrico, pese a los generosos incentivos fiscales que se le otorgan, no ha logrado hasta ahora afianzarse como opción. En Estados Unidos y en la Unión Europea representó apenas el 1% de las ventas en el primer semestre del año, aunque en algunos países las matriculaciones crecen a un ritmo exponencial.
Pero Tesla apostó por el largo plazo e inició la construcción de una fábrica gigante de baterías para el Model 3 en Nevada. Según Musk, esa planta podrá producir medio millón de coches al año en 2020, una cifra que multiplica por diez sus objetivos de venta en 2015.
La marca californiana aplaude además la llegada de nuevos actores.
"Para nosotros, es una gran victoria comprobar que los nombres más respetados de la industria automotriz alemana reconocen que el coche eléctrico es el futuro, y que se comprometan públicamente a fabricarlos", declaró Ricardo Reyes, vicepresidente de Tesla.
"Para nosotros, la competencia ya existe", porque "tratamos de rivalizar con las mejoras berlinas de lujo del mundo alimentadas por carburante, y de demostrar que un vehículo eléctrico puede reemplazarlos ventajosamente", agregó. Y ese desafío "no podemos realizarlo solos", concluyó.
Tesla registró sin embargo mil millones de pérdidas en el primer semestre, pero Musk prevé que su negocio empiece a arrojar beneficios dentro de cinco años.
Una apuesta en la que cree también Wall Street, donde la acción de Tesla multiplicó su valor por ocho desde inicios de 2013, alcanzando una valoración bursátil de más de 30.000 millones de dólares. Un resultado que alimentó las sospechas de burbuja especulativa.
"Es una start-up, y la valoración de una start-up es la de un modelo de negocios", justifica Yann Lacroix, experto del ramo automotor de la aseguradora Fuler Hermes.
Pero Lacroix duda de las posibilidades de crecimiento rápido del mercado.
"A menos que haya subvenciones y obligaciones, mientras no exista competencia en las ofertas, no creo que el mercado explote", afirma.
Luca De Meo, jefe de ventas de Audi, cree en cambio que en 2018 o 2019 la tecnología y las infraestructuras habrán hecho avances considerables y que eso facilitará la popularización de los vehículos eléctricos.
Mercedes-Benz (Daimler) también se apresta a lanzarse al nuevo mercado. Su director, Dieter Zetsche, confirmó el martes que su grupo se proponía lanzar un coche eléctrico con una autonomía de 400 a 500 km antes del fin de esta década. Y BMW parece decidido a ir más lejos, después del lanzamiento del deportivo híbrido i8 y sobre todo del i3, un coche urbano totalmente eléctrico.