Una vez los rubros más dinámicos fue lo percibido por Ganancias con 41,7% de aumento e IVA neto con 39,2%. Le siguió el cobro de aportes y contribuciones sobre la nómina salarial y autónomos con un incremento de 35,4 por ciento.
Por el contrario, se mantienen rezagadas las percepciones por el cobro del impuesto al cheque que apenas se elevó 20,5%, fenómeno que indicaría un aumento de la informalidad de la economía; y también los ingresos por retenciones a las exportaciones y derechos a la importación que en conjunto apenas aportaron 5,6% más que un año atrás.
Si bien el aumento total de la recaudación tributaria en 33%, a 132.515,2 millones de pesos, superó con creces cualquier índice de inflación, que para el promedio de las consultoras privadas se ubica en torno a 27% en comparación con un año atrás, sobresale el pobre desempeño del crecimiento de lo ingresado por el Impuesto a los Créditos y Débitos bancarios, porque indicaría un singular aumento de la informalidad de la economía.
El pobre desempeño del Impuesto al Cheque indicaría un fuerte aumento de la economía informal
Ese punto es habitualmente ignorado por el Administrador Federal de Ingresos Públicos, Ricardo Echegaray, y el secretario de Hacienda, Juan Carlos Pezoa, quienes destacaron en conferencia de prensa que "el número de recaudación es muy grande, y se debe al movimiento de la actividad, como ayer informó el Indec, en el caso de la construcción".
Si se ajusta la suba del 39,2% de lo ingresado por IVA neto por la inflación real, se percibe un crecimiento del PBI en los últimos doce meses en aproximadamente 10%. Mientras que si se repite el ejercicio con el incremento de 20,5% de lo captado por el impuesto al cheque, surge que la actividad agregada se contrajo en términos reales casi 5% respecto de agosto de 2014.
Según lo cobrado por IVA, el PBI creció 10% en un año, pero según el impuesto al cheque cayó 5%
Un análisis similar para el acumulado de los primeros ocho meses del año determina que el IVA creció ocho puntos porcentuales más que la inflación, mientras que débitos y créditos bancarios bajó menos de un por ciento real.
Echegaray y Pezoa evitaron hacer esos análisis y, por el contrario destacaron el buen desempeño de los recursos que ingresaron a la Anses por aportes y contribuciones sobre la nómina salarial, y también por parte de trabajadores autónomos, con un crecimiento de 35,4%, manteniendo un ritmo de aumento constante a lo largo del año.
Sin embargo, pese a que semejante tasa de incremento superó la variación promedio de las remuneraciones, y no se advierte expansión del empleo, sobre el final de la conferencia Ricardo Echegaray advirtió que "están llegando datos a la AFIP que indicarían que algunos empleadores no estarían declarando la totalidad de los salarios pagados a sus empleados", con lo que sospecha que la percepción del Sistema de Seguridad Social es inferior al esperado.
Con todo, Ricardo Echegaray destacó que los $999.565,6 millones que por todo concepto ingresaron a la AFIP desde comienzos del año, no sólo marcó un aumento de 32,2% respecto de igual período del año anterior, sino que además superó en 3,4% la meta del Presupuesto para ese período.