"Nuestra decisión es que el Banco Central de la República Argentina puede invocar su propia inmunidad soberana en el pleito con bonistas que no quieren permitir a la Argentina que pueda honrar sus compromisos externos".
Del escrito de 43 páginas se desprende que la Corte de Apelaciones invita al juez de Nueva York, Thomas Griesa, a que revea su fallo de trabar embargos sobre los pagos de deuda externa de la Argentina, porque considera que las cuentas del Banco Central de la República Argentina en los EEUU no podrán ser embargadas.
De este modo la Corte de Apelaciones de NY revierte un fallo de Griesa de 2013 y dice que el BCRA no es alter ego del Estado.
Se trata sin duda de una medida esperada por el gobierno argentino, en momentos en que se avecina un megapago de deuda en dólares por la última cuota de amortización de capital e intereses del Boden 2015 por unos 6.300 millones de dólares.
El fallo de la Corte de Apelaciones aclara que a pesar de que el BCRA puede invocar su propia inmunidad soberana en esta demanda, no significa que la República pueda evitar tener que negociar con los acreedores, aunque reconoció "sospechar" que este "será un previsible y desafortunado resultado de la decisión".
El fallo había sido buscado por tenedores de bonos incluyendo a NML Capital Ltd, que es una unidad de Elliott Management Corp de Paul Singer, y EM Ltd, controlado por el inversor Kenneth Dart, quienes pretendían ir tras los fondos que el BCRA tiene en jurisdicciones extranjeras, agrega un reporte de Reuters.
Pero un panel de tres integrantes del Segundo Circuito revirtió la medida, diciendo que el BCRA podía invocar su propia inmunidad soberana para evitar la responsabilidad y ordenó a Griesa que descarte el caso.
El juez de circuito José Cabranes escribió que el fallo de la corte no tiene la intención de permitir que Argentina "continúe eludiendo las deudas que tiene capacidad de pagar, aunque sospechamos que esto será un resultado predecible y desafortunado de nuestra decisión". Pero Cabranes dijo que el Banco Central tenía el derecho de invocar su propia inmunidad soberana como defensa.
Carmine Boccuzzi, un abogado de la Argentina, dijo estar "gratificado" por la decisión, que según señaló era la tercera en rechazar los esfuerzos de los tenedores de bonos de ir por los activos del banco central. Un representante de NML Capital se abstuvo de comentar. Representantes del BCRA y de EM Ltd no respondieron inmediatamente a pedidos para que hicieran comentarios.
El fallo se originó en un largo juicio que llevan adelante los acreedores que buscan el repago total de los bonos después del default de 100.000 millones de dólares que protagonizó el país en 2002. Esos acreedores no adhirieron a los canjes de deuda de Argentina de 2005 y 2010, que resultaron en que un 92 por ciento de su deuda incumplida fuera intercambiada y que se terminara pagando a los inversores menos de 30 centavos por cada dólar.
El país volvió a incumplir pagos en julio de 2014 después de que se negó a honrar pedidos para que pagara 1.330 millones de dólares más intereses a NML Capital Ltd y otros fondos de cobertura que habían acudido a las cortes por los títulos. Griesa ordenó a Argentina en junio que pagara 5.400 millones de dólares a más de 500 tenedores de deuda incumplida antes de que pudiera pagar a la mayoría de los acreedores.
Alivio para el Banco Central
"La decisión de la Corte de Apelaciones de Nueva York sienta un precedente internacional y garantiza de manera decisiva la inembargabilidad de las reservas del Banco Central de la República Argentina (BCRA) frente a la pretensión de los fondos buitre y demuestra que el BCRA desarrolló una estrategia correcta en este litigio", afirmó el presidente de la entidad, Alejandro Vanoli.
Vanoli se expresó así tras conocerse que el BCRA obtuvo sentencia favorable de la Corte de Apelaciones del Segundo Circuito de Nueva York por la cual se pone fin a la demanda conocida como "Alter Ego", iniciada en 2006 por los fondos buitre NML y EM.
El fallo de la Corte de Apelaciones ordenó al juez del distrito sur, Thomas Griesa, desestimar la demanda de los fondos buitre NML y EM, orientada a embargar activos del BCRA con el fundamento de que es el alter ego del Gobierno de la República Argentina.