Las huellas sobre los autos no dejaban lugar a duda: los amantes de la "caminata lunar" habían atacado de nuevo en la capital de la provincia de Buenos Aires.
En esta ocasión, los vecinos de la calle 54, entre 25 y 27, se despertaron asustados por los golpes y el estallido de cristales que hicieron saltar las alarmas de los coches que estaban estacionados en la zona.
Eran cerca de las 4 de la madrugada y los que reaccionaron más rápido llegaron a ver se trataba de "entre 30 y 40 chicos que corrían por sobre los autos, rompiendo ventanas con palos y piedras", contó Leonel Maccini en declaraciones que recoge el diario El Día.
El grupo de desconocidos comenzó la "caminata lunar" sobre la calle 25, dobló en 54 y continuó con los destrozos hasta la 27. El comportamiento y la forma de hablar de los vándalos denotaba que muchos de ellos -cuanto menos- estaban alcoholizados.
Los "corredores lunares" se caracterizan por saltar con agilidad sobre los parabrisas de los autos y al caer empujan con fuerza hacia abajo, para hundir las chapas de los automóviles y lograr el impulso que les permita caer en el siguiente.
El paso de los agresores es rápido y logra eludir el accionar policial porque cuando los vecinos dan aviso a las autoridades ya es demasiado tarde. Un nuevo problema a resolver en La Plata.