El ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Sergei Lavrov, dijo que Estados Unidos debería cooperar con el dictador sirio, Bashar Al Assad, en la lucha contra el Estado Islámico (ISIS, por sus siglas en inglés) y que esto requiere de una coalición internacional que reúna a todos los "enemigos comunes" de los yihadistas.
Washington actualmente lidera una coalición que realiza ataques aéreos contra el Estado Islámico en Siria e Irak y coopera con Turquía para brindar respaldo aéreo para los rebeldes en Siria. Moscú, sin embargo, ha criticado a Estados Unidos por su negativa a trabajar en coordinación con la dictadura siria, aliada de Rusia.
En comentarios a la televisión estatal rusa publicados el domingo por su ministerio, Lavrov se refirió a dos reuniones con el secretario de Estado de Estados Unidos, John Kerry, en medio de los recientes contactos diplomáticos de alto nivel por la situación en Siria y la lucha contra los yihadistas suníes.
"Nuestros socios estadounidenses y algunos países en la región se niegan persistentemente a reconocer a Al Assad como socio, lo que es algo extraño", dijo Lavrov. "Al Assad fue un socio completamente legítimo a la hora de destruir armas químicas, pero de alguna manera no lo es en la lucha contra el terrorismo", dijo el canciller, refiriéndose al acuerdo de desarme químico mediado por Moscú y Washington previamente durante el conflicto.
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En las declaraciones publicadas el domingo, Lavrov sostuvo que le dijo a Kerry que hay un alto riesgo de que los ataques aéreos en Siria afecten a un blanco erróneo y que exacerben el conflicto. La coalición propuesta por el gobierno de Vladimir Putin, dijo Lavrov, "uniría a todos los que ya luchan en terreno" y que se oponen al ISIS, por lo cual la propuesta incluye también a ciertos sectores rebeldes. Mencionó, así, a los ejércitos de Siria e Irak, a los kurdos y "a la parte de la oposición armada que representa a los sirios".
Estados Unidos, su aliado Arabia Saudita y la oposición siria y grupos rebeldes a los apoya dicen que Al Assad debe dejar el poder. Ellos no quieren cooperar con él, ya que esto podría ser interpretado como una legitimación de su cargo. Lavrov discutirá el martes en Moscú la situación en Siria y la lucha contra el ISIS con su homólogo saudí, Adel al-Jubeir. Ambos también tratarán "una coordinación más estrecha sobre los mercados globales de energía", dijo el ministerio ruso.
Rusia es uno de los mayores productores de petróleo del mundo y los bajos precios del crudo están afectando a su presupuesto. Moscú sostuvo múltiples reuniones al respecto con miembros de la OPEP, incluido Riad, pero la organización se ha concentrado en defender su participación de mercado más que en subir el precio.