La inflación se aceleró 12,8 por ciento en julio, el porcentaje mensual más alto registrado por el Banco Central de Venezuela desde abril de 1989 cuando cerró en 13,5%, según un artículo publicado hoy en el diario El Nacional. Con ese número, difundido de forma extraoficial, la suba de los precios en el país caribeño acumula un 89,6% entre diciembre del año pasado y julio de 2015. De mantenerse la tendencia, la proyección es una inflación de 139% anualizada.
La información forma parte de los datos originales primarios recogidos por los departamentos de estadística de BCV y del Instituto Nacional de Estadística, que son entregados el día 29 de cada mes. Los resultados se basan en encuestas que realizan mes a mes los dos organismos y que están diseñadas ajo modelos de recolección de datos supervisados y revisados por personal técnico, de acuerdo con el mencionado periódico.
Para finales de 2015, la consultora Ecoanalítica calcula que el índice general de inflación en Venezuela podría cerrar por encima del 200%. Específicamente en el rubro de alimentos, el pronóstico es que la canasta básica del Centro de Documentación y Análisis para los Trabajadores (Cenda) llegará a 2016 con un alza superior al 200 por ciento. Mientras que entidades internacionales como Bank of America reportaron para mayo una inflación anualizada de 108%, y calculan que al cierre rondará el 174 por ciento.
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La inflación es uno de los síntomas de la crisis. Otro es la aguda escasez en los mercados, principalmente de alimentos y medicinas, y su irregular aparición a precios encarecidos en mercados informales, así como su adicional fuga al exterior como contrabando. El presidente venezolano, Nicolás Maduro, achaca la crisis a una "guerra económica" de la oposición y de los empresarios de Fedecámaras, y estos, a su vez, a malas políticas macroeconómicas y a la corrupción.
El presidente de Fedecámaras, la principal patronal de Venezuela, Francisco Martínez, tildó hoy de "muy aguda" la crisis económica nacional y estimó que el presidente debe adoptar correctivos "fuertes" y "consensuados". "Estamos dispuestos a acompañar al Gobierno si, y solo si estamos incluidos en el consenso, toma medidas correctivas; uno no puede ocultar la realidad y en este momento hay una crisis muy aguda que debe ser atacada por un proyecto consensuado entre el sector público y el privado", dijo en la emisora privada Televen.
Según Maduro, los saqueos fueron ejecutados por la "derecha maltrecha"
En medio de la crisis, la inflación y la escasez, el viernes se registraron saqueos en un comercio de alimentos en el estado de Bolívar, al sudeste del país. Durante los enfrentamientos, murió un joven. Según Maduro, se trató de un evento "planificado" y ejecutado por "la derecha maltrecha". "Me informa el gobernador y todos los cuerpos de investigación que fue un acto planificado, hay 60 presos, asesinaron vilmente a un trabajador", dijo durante un acto transmitido por la televisión estatal VTV.
El mandatario venezolano relacionó el suceso con una declaración hecha por el jefe del Comando Sur de Estados Unidos, el general John Kelly, a mediados de marzo, en las que aseguró que el país petrolero estaba "cerca del colapso y de implosionar" por la situación económica. "Fíjense ustedes que el general Kelly, el general comandante de del Comando Sur de EEUU, hace cuatro meses vaticinó que julio era el mes de la implosión social en Venezuela. Ustedes saben que un general del ejército de EEUU no vaticina, ordena, actúa, y la derecha maltrecha de Venezuela ejecuta", afirmó.
En respuesta, la alianza opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) convocó para el 8 de agosto a la "jornada nacional de protesta contra el hambre, el hampa y por la libertad", según anunció el secretario ejecutivo, Jesús Torrealba. "Tendrá lugar simultáneamente en Caracas y en todas las capitales de estado y en ella plantearemos el conjunto de propuestas que la MUD exige sean adoptadas de inmediato para enfrentar con sentido común y no con balas la crisis creada por la corrupción e ineptitud oficial", precisó.