Los datos que surgieron de la Encuesta Anual de Hogares Urbanos que desde 2010 comenzó a realizar el Instituto Nacional de Estadística y Censos, correspondiente al tercer trimestre de cada año, no serían tan inquietantes si no fuera porque la mayoría de las jurisdicciones y en especial la administración central enfrentan crecientes déficits fiscales y acusan severas carencias en la provisión de servicios de salud, educación, seguridad pública y jurídica, infraestructura básica de vivienda, vial y energética de calidad al conjunto de la población.
Es justamente gran parte de esos desequilibrios lo que ha llevado a una creciente recesión y destrucción de empleos en el sector privado, porque tanto empresas como asalariados debieron destinar una porción más alta de sus ingresos para financiar al sector público, a costa de postergar consumos e inversiones productivas.
El aumento del gasto público afectó al sector privado
El Indec dio cuenta de que en el tercer trimestre de 2014 la provincia con mayor proporción de empleos públicos fue Santa Cruz, con 48,6% del total de la jurisdicción. Se incrementó en más de ocho puntos porcentuales respecto de igual período del año anterior. Le siguió parte de La Rioja con 48,3% de los trabajadores, aunque para el total del distrito el organismo oficial de estadística midió 38,5%. Se incrementó en casi dos puntos porcentuales.
En un segundo lote, con una proporción de más de un empleado público por cada tres privados, el Indec ubicó a la provincias de Catamarca 37,8%; y los grandes aglomerados urbanos de Neuquén, excluidas la ciudad capital y Plottier 34,6%; Rawson-Trelew 34,9%; Jujuy-Palpalá 33,5%; Gran Paraná 32,2% y Gran La Plata 30,3% del total de empleos.
Mientras que en un conjunto más nutrido se suman diversos distritos con una proporción de un empleo público por cada cuatro privados, es decir muy por arriba del promedio nacional que ascendió a 17,8% (poco menos de uno cada cinco), cuando un año antes representaba 17,1% y al comienzo de la serie en 2010 se estimó en 16,8 por ciento.
El Instituto de Estudios Laborales y Sociales de la UCES estimó, sobre la base de 15,68 millones de empleos totales que obtuvo el Indec sobre una población urbana de poco más de 35 millones habitantes, que en el tercer trimestre de 2014 se desempeñaban en la administración pública 2,79 millones de personas, mientras que 12,67 millones lo hacían en el sector privado y 220 mil en empresas mixtas. Si se extrapola al total país, el total de ocupados en la función pública pagados con recursos privados ascendió a unas 3,1 millones de personas.
Senda claramente expansiva en cantidad y precio
La serie que se inició en 2010, antes del cepo cambiario, comenzó con una participación del empleo público en el total de ocupados, en blanco y en negro, como patrón, cuentapropista, asalariados y familiares sin renta, de 16,8%; subió a 16,9% el año siguiente; saltó a 17,7% en 2012, y se retrajo doce meses después a 17,1%, pero no se sostuvo en ese camino y alcanzó en el último año el pico de la serie.
En el primer trimestre de 2015 el empleo público creció 5,2% y el privado 1,6% anual
Pero el récord parece que no quedará ahí, por cuanto el Ministerio de Economía indica en su último informe bimestral, correspondiente al período marzo a abril, que "el Sistema Integrado Previsional Argentino (SIPA) registró 103.517 nuevos puestos en el sector privado en el primer trimestre de 2015, lo que significó una variación anual de 1,6%", en tanto que "el crecimiento de la Administración Pública fue del 5,2 por ciento".
La "bolsa de trabajo" en que, una vez más en la historia argentina, se constituyó la administración pública, en todos los órdenes de gobierno, tanto nacional, como provincial y municipal, no sólo se agrandó en los primeros meses del corriente año por el mayor peso de la nómina, sino que también el derivado del aumento de los salarios por sobre el promedio del sector privado.
Según el informe de marras, "los salarios del sector público fueron los que presentaron mayores subas durante marzo y abril, con incrementos del 7,7% y 2,6% mensual respectivamente. Pero la suba también alcanzó al sector privado registrado, que experimentó subas de 1,6% y de 1,3%. Finalmente, el Sector No Registrado se incrementó un 1,5% mensual en marzo, mientras que en abril se mantuvo estable".
El salario en el sector oficial subió en abril 35,4% y en el sector privado 24% anual
Y agrega el estudio que "los salarios en el sector público también mostraron los mayores incrementos anuales en ambos meses: 35,6% en marzo y 35,36% en abril. El sector no registrado mostró subas anuales del 35,1% y 31%. Por último, el sector registrado exhibió alzas del 30,5% en marzo y del 24% en abril".
Esa dinámica no favoreció al conjunto de la población trabajadora que en los últimos tiempos perdió su empleo, ya que la citada Encuesta Anual de Hogares Urbanos del Indec dio cuenta que más de un cuarto de los desocupados acumulaba en septiembre de 2014 más de un año sin poder reinsertarse en una actividad rentada, y el conjunto se ampliaba a más de 40% del total, 1,3 millones de desempleados que estaban inactivos más de un semestre.
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