Al día siguiente de ser elegido como líder de la Iglesia católica, Francisco apareció -con hábito blanco- en la Basílica de Santa María Maggiori para rezar de rodillas al pie del altar de la Virgen Salus Populi Romani (la Virgen de la Salud del Pueblo Romano). En la víspera de cada uno de sus viajes pasa por ahí a encomendarle su misión a ella. Y cuando regresa del aeropuerto de Ciampino, antes de ir a Santa Marta, hace detener la comitiva para dejarle sus ofrendas.
Sin ninguna connotación política, es oportuno recordar que en ese mismo lugar rezaba Juan Domingo Perón -entre 1939 y 1941- cuando era agregado militar de la embajada argentina en Roma. Una investigación del doctor Ignacio Cloppet Villars señala que en la pensión de Vía del Esquilino 29 -hoy un hotel boutique-, justo frente a la Basílica, vivió el ex presidente argentino.
La imagen en cuestión es un ícono bizantino de la Virgen y El Niño que tiene sus ancestros en los primeros cristianos. Su nombre mariano es " odigritia", que significa "aquello que muestra el camino". Según la tradición, fue pintado por San Lucas en un trozo de madera que se utilizó en la Última Cena de Jesús con los Apóstoles.
. Fue y es, además,
: Pablo VI, Juan Pablo II, Benedicto XVI y Francisco lo honraron con visitas personales y diversas celebraciones litúrgicas. El 7 de septiembre del 2013 fue llevado, como excepción y a pedido del actual Papa, a la Plaza de San Pedro en la vigilia de oración por La Paz en Siria.