El ministro paraguayo del Interior, Francisco de Vargas, apuntó a la guerrilla EPP como presunta autora del reciente asesinato de dos policías en el norte del país, una hipótesis reforzada tras descubrirse un campamento con explosivos cerca del lugar de los hechos.
Las víctimas, los suboficiales Adalberto Candia y Egidio Chávez, iban el domingo a bordo de una patrullera por un camino vecinal cerca de la ciudad de Capitán Bado, fronteriza con Brasil, cuando fueron emboscados por unas ocho personas.
Luego los obligaron a bajar del vehículo y les dispararon a corta distancia, dijo el ministro en una rueda de prensa.
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Posteriormente se encontró a unos 200 metros de ese lugar un campamento camuflado por la vegetación y con trampas explosivas que fueron desactivadas por artificieros, las cuales estaban preparadas para ser activadas y detonadas al paso de personas.
Según el ministro, ese procedimiento descarta que el asesinato fuera obra de una banda de narcotraficantes, como en un principio se barajó, y dijo que cobra más fuerza la teoría de que sus autores pertenecieran al Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP).
Añadió que posiblemente los presuntos guerrilleros planificaron de modo improvisado el ataque a las víctimas, quienes regresaban hacia su destino en la comisaría de Aguará tras haber realizado un servicio en la zona de Río Verde.
En el lugar donde yacían los cuerpos de los policías se hallaron unos 50 casquillos de bala, mientras que el vehículo se encontraba parcialmente calcinado.
El ministro explicó que el cuerpo de uno de los policías asesinados fue hallado con los dedos entrelazados y las manos sobre la cabeza, lo que muestra que se trató de una "ejecución cobarde".
"Una vez más recurrieron al factor sorpresa, porque sorprendieron a los efectivos policiales y les dieron muerte, porque los ejecutaron", dijo el ministro en una rueda de prensa.
También mencionó que el suceso se produjo en el departamento de Amambay y a unos 10 kilómetros del lugar del último ataque atribuido al EPP, ocurrido en marzo en el vecino departamento de San Pedro, donde fueron asesinados tres peones de un recinto ganadero.
De Vargas explicó que ello evidencia que el EPP se está desplazando hacia Amambay, donde se producen las mayores incineraciones de cultivos de marihuana del país.
De acuerdo con el ministro, existe una asociación entre los grupos de narcotraficantes y el EPP.
El Gobierno paraguayo atribuye al EPP medio centenar de asesinatos y varios secuestros desde 2008, fecha de su fundación.
Paraguay es el principal exportador de marihuana de Sudamérica, droga que tiene como principal destino el vecino Brasil.