Los abogados de Paulina Rubio renunciaron formalmente a representarla ya que aseguran que desde hace un año que no les paga y han conseguido que se imponga un embargo a la mansión de Miami de la intérprete para obligarla así a abonar el dinero que les debe, según se informó en el programa El Gordo y la Flaca de Univisión.
La cantante mexicana tiene que conseguir un nuevo letrado; si no, tendrá que representarse ella misma en las próximas audiencias con su ex marido, Nicolás Vallejo-Nágera, por temas relacionados con su hijo Andrea, de 4 años.
El empresario la demandó porque no le ha pagado supuestamente la pensión que tiene que darle para los gastos del menor. Se estima que la cifra ronda los u$s30 mil. Además, en su denuncia reclama más tiempo con su hijo.
Paulina recientemente fue noticia por su extraño comportamiento durante un programa de TV en España. Su euforia desmedida llamó la atención de los espectadores. En las redes sociales se preguntaron si no estaba ebria.