El socialismo pidió a la Justicia electoral de Santa Fe que no se abran todas las urnas

Requirió que se desestimen los planteos del PRO, el Frente Justicialista para la Victoria y la izquierda. El tribunal resolvería en las próximas horas. De prosperar los reclamos, el escrutinio tardaría 45 días

Télam 162

Aquejado por las críticas y sospechas de irregularidades, el Frente Progresista, Cívico y Social ensayó esta tarde una suerte de contraataque para responder a la ofensiva de los partidos opositores en la Justicia a propósito de una elección que, por reñida, por ahora no tiene un ganador. A contramano del resto, pidió al tribunal electoral que se limite a habilitar la revisión el contenido de cada boleta en caso de que la información oficial no coincida con la que tienen los fiscales de las fuerzas.

En un escrito al que accedió el sitio Rosario3, sostuvo que el "escrutinio provisorio o recuento provisional se hace sobre telegramas, no sobre actas". Al respecto, explicó que el primero puede ser ilegible o albergar fallas y por eso no es cargado al sistema en el primer conteo, mientras que el acta es un documento oficial final.

"Si el acta está bien, si está completa y consistente, el acta es el último documento", insistieron los apoderados del partido en el texto, que se apoyó en la observación que más temprano hizo el director electoral de la Nación, Alejandro Tullio, al explicar que "el recuento de votos es ilegal si el acta está bien hecha".

El oficialismo exigió así que no se dé curso a las peticiones que hicieron el PRO de Miguel Del Sel, el kirchnerismo representado por Omar Perotti y el postulante a gobernador del Frente de Izquierda, Octavio Crivaro. En su fundamentación, advirtió que no se cumple la "causal extrema prevista en el Código Electoral" para abrir todas las urnas.

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El tribunal esperaba por estas horas el dictamen del procurador Jorge Baraguirre antes de expedirse sobre cada una de las presentaciones. Roberto Falistocco, titular del cuerpo, admitió que si se hace lugar a los pedidos para que se abran todas las urnas, el escrutinio definitivo llevaría 45 días. Ese fue el tiempo que tomó el recuento que se tuvo que hacer en 1995, luego de un escándalo por la caída del sistema informático registrado tras una elección.

El postulante de Frente Progresista, Cívico y Social, Miguel Lifschitz, se adjudicó el triunfo el domingo pese a que el margen que consiguió sobre Del Sel y Perotti fue incluso inferior a los votos que quedaron observados, y que podrían torcer el resultado.