"La felicidad es un valor sociopolítico que debe ser perseguido por los gobiernos"

La socióloga Marita Carballo habló en InfobaeTV sobre su más reciente libro "La felicidad de las naciones". Definió a este estado emocional como "una mezcla de placer, sentido y compromismo"

"La felicidad es la evaluación que hace una persona de su calidad de vida en determinado momento. Es una mezcla de placer, sentido y compromiso". Así definió la sociológa Marita Carballo durante su charla en InfobaeTV al estado emocional a la que le dedicó una extensiva investigación que acaba de transformar en un libro, titulado "La felicidad de las naciones".

La obra repasa el concepto de felicidad desde la antigua Grecia (Aristóteles definió a este estado como "el bien supremo") hasta nuestros días. Las autora entiende que los avances que hubo en materia de ciencias sociales y en la economía, entre otros factores, permite "medir cuán felices se sienten las personas".

Al respecto, la experta señala por ejemplo que la salud, tanto física como mental, es un elemento de suma trascendencia para la felicidad. Apunta además que el consumo de productos tiene a no rendir como las experiencias en el mediano plazo.

"La felicidad es un valor sociopolítico que debe ser perseguido por los gobiernos", aseguró al observar la política debería dar mayor importancia a trabajar sobre ese concepto.

En base a indicadores concretos, el libro incluye un una suerte de ranking mundial de la felicidad. México aparece a la cabeza del listado y el resto del top 10 aparece compuesto mayoritariamente por países nórdicos. El otro extremo lo ocupan naciones muy pobres de África y algunas que supieron estar bajo la égida comunista.

La clave de la felicidad en países como Islandia, Dinamarca y Finlandia está vinculado con un alto nivel de vida, servicios público de óptimo nivel, y gobiernos confiables.

Según este estudio, Argentina se ubica en el puesto 28 de esta ranking y es llamativa la poca confianza que muestran los habitantes del país sobre sus instituciones y otros individuos: solo 2 de cada 10 argentinos confían en el prójimo.

Aludiendo al vínculo entre política y ciudadania, Carballo afirmó: "Los gobiernos no pueden decidir que seamos felices y por eso vayamos a serlo; pero sí se pueden crear condiciones que nos permitan serlo".