El presidente de la financiera Global Exchange, Isidoro Alanís, atribuyó el cierre de sus oficinas en el país a que "el cepo cambiario" los "afectó en forma terrible" y advirtió que "la situación de Argentina cada vez va peor". "Argentina tendrá que volver a recuperar el gran país que tiene y volverá otro ciclo de estabilidad política", analizó.
El responsable de una de las mayores casas de cambio a nivel mundial señaló que en abril se retiraron del país "porque estábamos perdiendo 100 mil dólares todos los meses". "El cepo cambiario nos ha afectado en forma terrible", afirmó el directivo desde Madrid, en una entrevista con Hebe Schmidt, publicada hoy por Perfil.
Global Exchange, que tiene 150 oficinas en más de una decena de países, había llegado a la Argentina en octubre de 2001 y estuvo presente en todos los aeropuertos del país. "Creo que la situación de Argentina cada vez va peor", alertó el directivo.
En marco del LatAm Global, un foro apoyado por el World Economic Forum, celebrado en la capital española, Alanís habló del paso por la Argentina de la casa de cambios que lidera.
"Nosotros estuvimos hasta el año 2012 gestionando todos los aeropuertos en Argentina, el 7 de septiembre de 2012 teníamos a 150 personas trabajando, y esa tarde, recibimos un comunicado del Banco Central de Argentina diciendo que se prohibía nuestra actividad en los aeropuertos porque sólo era permitida la del Banco de la Nación", recordó. A partir de ahí, manifestó, "empezó un calvario que nos llevó un año y medio casi dos, hasta que en abril de este año, y después de 14 años, tuvimos que cerrar".
Alanís sostuvo que esa decisión la casa de cambios la adoptó "con una pena terrible porque sabemos que va a ser muy difícil volver, ya que los sistemas del Banco Central no permiten fácilmente tener las licencias".