Tras su sorpresiva y repentina salida del drama televisivo Grey's Anatomy, Patrick Dempsey decidió alejarse un tiempo de la TV. En lo personal, el actor, de 49 años, no vive un buen momento. Su mujer, la maquilladora y diseñadora de joyas Jillian Fink, le pidió el divorcio el pasado enero, tras 15 años de matrimonio.
La estrella puso en venta la casa de Malibú en donde vivió con su esposa y sus tres hijos por más de seis años. La ex pareja también pelea en la corte por u$s40 millones, ya que no hubo un acuerdo prenupcial de por medio.
Una fuente aseguró que Dempsey está desolado por la ruptura. "Ya había estado casado y divorciado y había dicho que nunca volvería a separarse, por sus hijos", aseguró una persona cercana al artista.
Dempsey, que interpretó a Derek Sheperd por once temporadas en el programa de la cadena ABC, dijo a la revista Entertainment Weekly que ahora desea centrarse en su familia y dedicarse a su carrera como piloto.
Desde hace dos años, es miembro de la familia Porsche y ha participado en carreras como Daytona.
En cualquier caso, el protagonista de Can't Buy Me Love no da la espalda a Hollywood: "Quiero probar algo diferente. ¿No puedo ser otra persona? Ese será el gran desafío, que la gente me acepte con otro papel".