realizó 7 ediciones de
y una más en su versión con famosos. Las distintas temporadas tuvieron buenos y dispares resultados en materia de rating, pero todas lograron una gran repercusión.
Esta tarde Jorge Rial abrió la emisión de Intrusos contando la gran apuesta que hace América al emitir GH. "Es todo un desafío en una televisión en la que es más fácil tirar una lata, que sale 500 dólares, y que si funciona como Las mil y una noches te puede hacer 10 puntos y, si no le va bien, se levanta".
Y tal como lo cuenta quien será el conductor de las galas del reality, que se emitirán los días miércoles en horario central, la apuesta de América es sin dudas un gran desafío. Sobre todo porque pone en juego el rating de varias horas de su transmisión durante más de tres meses.
Y no solo eso, para que el proyecto funcione pone al frente de la batalla a tres de sus figuras más importantes de su pantalla. Como ya mencioné estará a la cabeza del reality Jorge Rial, quien es el conductor del programa de mayor rating del canal, Intrusos. Pero además formará parte Pamela David, la conductora de la mañana de América, quien llevará adelante los debates de Gran Hermano.
Por su parte Rodrigo Lussich, conductor de Infama, acompañará en las galas a los participantes que vayan saliendo de la casa y tendrá un ciclo los domingos en el que hará un resumen del fin de semana. A estas tres figuras se le suman diversos panelistas, que también forman parte de los distintos programas de la emisora.
Esta importante apuesta de América se medirá en rating, pero también en el balance económico ya que para poder llevar a cabo este reality se realizó una gran inversión que incluyó, junto a Endemol, la construcción de la casa en Estudio Mayor, en el barrio porteño de Palermo, y los altos costos de producción que conlleva hacer este programa, que tendrá 54 cámaras y el trabajo de varios técnicos las 24 horas del día.
Está claro que si el reality funciona, todos los programas podrán nutrirse del material que generen los participantes. Desde Desayuno, pasando por Intrusos, Los unos y los otros, Infama, Animales sueltos y hasta Intratables, si los hermanitos debaten o se pelean por cuestiones polítcas. Los noticieros también podrían alinearse si dentro de la casa se cuenta alguna historia de vida interesante.
Los fines de semana además se animarían a espiar qué pasa en la casa en Ponele la firma, Secretos verdaderos, Pasión de sábado o en el programa que esté al aire. Todos tendrían posibilidades de sumarse al éxito.
Apostar significa jugársela a algo, muchas veces sin tener la seguridad de que se va a ganar. En este sentido América se la juega a que le irá muy bien. Pero en caso de que el rating sea apenas aceptable, los programas decidirán cuánto conviene meterse en el reality y, sobre todo cuándo. Porque seguramente irán viendo el rating minuto a minuto, sin dejar de lado los otros temas que surjan afuera de GH, como el caso Bernal-Diwan, Cinthia Fernández, o el que sea.
Habrá que ver qué postura toma el canal si la apuesta no funciona, es decir si el rating no cumple con las expectativas. Sin embargo para que eso pase, habrán pasado muchas y distintas estrategias. Porque si bien el programa tiene su Biblia, sus reglas, esto sigue siendo un show televisivo, en donde todo puede pasar.