Preguntado en una entrevista concedida a la emisora France Inter sobre cuántos atentados se habían desbaratado desde la oleada de ataques yihadistas que hubo a comienzos de enero en París, Valls respondió que cinco, incluido el plan que se atribuye a Ghlam.
Explicó que este hombre de 24 años "había recibido un encargo para cometer un atentado en una iglesia" de un interlocutor con el que estuvo en comunicación y que se sospecha que se encontraba en Siria.
A la cuestión de por qué las autoridades sólo han revelado este plan y no los demás, lo justificó porque en el caso de Ghlam "se estaba preparando el paso al acto" y hubo una mujer asesinada, "una nueva víctima del terrorismo", el domingo por la mañana en Villejuif, ciudad limítrofe con París.
El primer ministro insistió en que la amenaza terrorista en Francia "nunca ha sido tan importante" teniendo en cuenta los 1.773 franceses o residentes en Francia identificados por su vinculación con redes de reclutamiento de yihadistas, los 442 que están actualmente en Siria o Irak, los 97 que ya han muerto allí, 7 de los cuales en acciones suicidas.
Valls no quiso dar detalles sobre cómo y cuándo había comprado las armas que se le requisaron al sospechoso, ni si tenía cómplices, más allá de que "no actuó solo" y de que "hay redes" que prestan apoyo logístico a los terroristas y por eso hay que investigar.